Versiculos Para Meditar

Los enemigos desaparecen, pero Dios permanece para siempre

Salmo 9:5, 7-8  

Reprendiste a las naciones, destruiste al malo, borraste el nombre de ellos eternamente y para siempre... Pero el Eterno permanecerá para siempre; ha dispuesto su trono para juicio. Él juzgará al mundo con justicia, y a los pueblos con rectitud.

David no nombra los enemigos que Él estaba enfrentando en este salmo, así que los lectores a través de las generaciones han podido poner sus propios enemigos dentro de este pasaje. El no nombrarlos también encaja con el mensaje de este salmo. Los enemigos serán olvidados y sus caminos destructivos terminarán para siempre. Pero Dios nunca será olvidado y siempre será alabado por su rectitud y justicia.

Uno de los clamores más profundos del corazón humano es el clamor por justicia. La desigualdad, el acoso, la opresión y la corrupción han sido el estado continuo de la humanidad apartada de Dios. Nosotros podemos alabar a Dios por su justicia. Pero, ya que nosotros también hemos sido enemigos de Dios por pecar, podemos estar eternamente agradecidos por su misericordia.

Lea más acerca de la justicia de Dios (y su misericordia) en nuestro artículo “Propósito de la profecía”.