Y se multiplicará la paz de tus hijos
Y todos tus hijos serán enseñados por el Eterno; y se multiplicará la paz de tus hijos. Con justicia serás adornada; estarás lejos de opresión, porque no temerás, y de temor, porque no se acercará a ti.
De todas las promesas del venidero Reino de Dios, éstas son algunas de las más reconfortantes y alentadoras. Los padres se preocupan mucho por la seguridad y educación de sus hijos, ¡pero Dios promete enseñar a los hijos Él mismo y darles gran paz! Libertad de opresión, temor y terror son bendiciones inapreciables que todos nosotros querríamos proveer para nuestros hijos.
Jesucristo citó de este pasaje en Juan 6. Después de decir: “Ninguno puede venir a mí, si el Padre que me envió no le trajere”, Jesús dijo: “Escrito está en los profetas: Y serán todos enseñados por Dios. Así que, todo aquel que oyó al Padre, y aprendió de él, viene a mí” (Juan 6:44-45). Durante esta era presente, la Iglesia llamada por Dios es una manada pequeña (Lucas 12:32); pero cuando Cristo regrese, será quitado el velo que impide a la humanidad entender las verdades espirituales (Isaías 25:7-8). Todos podrán venir a Cristo.
Si usted desea aprender más acerca de la venidera era milenial y los cambios que ésta traerá a esta tierra, lea nuestro artículo “El Milenio de 1.000 años”.
