Normalmente las Epístolas Generales reciben menos atención que las epístolas de Pablo. Sin embargo, son una parte importante de las Escrituras y contienen información vital para la vida cristiana.
La Iglesia del primer siglo agrupó las siete epístolas escritas por Santiago, Pedro, Juan y Judas bajo el nombre de “generales”.
Estas “Epístolas Generales” son:
- Santiago
- 1 Pedro
- 2 Pedro
- 1 Juan
- 2 Juan
- 3 Juan
- Judas
Una “epístola” es una carta que será publicada y leída por algún individuo o un grupo de personas.
2 y 3 Juan, por ejemplo, fueron incluidas como Epístolas “generales” a pesar de que, aparentemente, fueron dirigida a individuos específicos. Algunos piensan que en realidad, estas cartas estaban dirigidas a toda la Iglesia, pero Juan las asignó a ciertos destinatarios específicos para proteger a la Iglesia de la persecución. Según el Davis Dictionary of the Bible [Diccionario de la Biblia Davis], “La señora elegida y Gayo —destinatarios de 2 y 3 Juan— probablemente representaban a toda la Iglesia” (p. 227).
Por otro lado, también existe la posibilidad de que estos siete libros fuesen agrupados sólo por conveniencia, ya que no cabían dentro de las demás agrupaciones del Nuevo Testamento. Es importante recordar que el término “generales” fue agregado por escritores cristianos del primer siglo, no era parte del texto griego original. Por lo tanto, puede no ser del todo preciso para describir estas siete epístolas. 2 y 3 Juan pueden realmente haber sido escritas para destinarios específicos.
Orden de valores cristianos
En 1 Corintios 13:13, el apóstol Pablo menciona tres virtudes cristianas, fe, esperanza y amor, que son examinadas en las Epístolas Generales:
- Santiago habla de la fe.
- Pedro habla de la esperanza.
- Juan habla del amor.
Ya que Santiago nos habla de los principios básicos de la vida cristiana —de los cuales la fe es una piedra angular, sus cartas encabezan este grupo de libros.
Contexto y síntesis del libro de Santiago
Dado que el Nuevo Testamento menciona a varias personas de nombre Santiago, la identidad del autor de este libro ha generado cierta controversia. Sin embargo, la mayoría concuerda en que fue escrito por el medio hermano de Jesús, a quien Cristo se apareció de forma especial luego de su resurrección (1 Corintios 15:7).
Como revelan las Escrituras, Santiago llegó a ser líder de la Iglesia en Jerusalén (Hechos 12:17; 15:13; 21:18) y dirigió la Conferencia de Jerusalén (Hechos 15), donde la Iglesia acordó que la circuncisión no era un requisito para los gentiles que quisiesen convertirse. Más adelante, Pablo reconoció a Santiago, Pedro y Juan como “columnas” en la Iglesia (Gálatas 1:18-19; 2:9).
Propósito
Santiago escribió esta epístola para los miembros dispersos —que enfrentaban muchas pruebas y tribulación— animándolos a ver las dificultades como oportunidades para desarrollar el carácter cristiano. Les explica que las pruebas producen paciencia (del griego hupomone), que también significa constancia, total determinación y persistencia; y, quien logre soportar esto, se convertiría en un cristiano perfecto y cabal (1:4).
Capítulo 1
Esta carta está dirigida a “las doce tribus que están en la dispersión”, que Santiago describe como “hermanos” o cristianos (1:1-2, 19; 2:1, 7). Luego de aludir a las pruebas que enfrentaban (1:1-4), el autor insta a sus lectores a sacar provecho de la adversidad con sabiduría y aplicando los principios de Dios (1:5-27).
Capítulo 2
Más adelante, Santiago fomenta el amor entre hermanos e insta a evitar la altivez, que se opone a la ley que nos dice: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo” (2:1-13). También explica que tanto la fe como las obras son importantes: “Muéstrame tu fe sin tus obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras.” (2:14-26).
Capítulo 3
Luego, Santiago nos dice que saber controlar nuestra lengua es muy importante para crecer espiritualmente (3:1-12). Y hace una clara distinción entre la sabiduría del mundo y la sabiduría de Dios (3:13-18).
Capítulo 4
Este capítulo trata varios temas, entre los cuales se habla de las causas de las guerras y los conflictos. Santiago advierte sobre la codicia y los deseos egoístas y nos insta a resistir al diablo acercándonos a Dios, a no hablar mal de otros, y a incluir a Dios en nuestros planes.
Capítulo 5
Santiago advierte acerca de los peligros de las riquezas y nos insta a no poner toda nuestra esperanza y deseos en las cosas terrenales. En cambio, debemos ser pacientes, poniendo nuestra fe y confianza en Cristo, que regresará a la Tierra para establecer su Reino y recompensar a sus siervos (5:1-11). También insta a los enfermos (5:14:16) a tener fe, tal como Elías lo hizo (5:16-18).
Contexto y síntesis de 1 Pedro
Aunque algunos críticos lo cuestionan, este libro dice haber sido escrito por Pedro (1:1). 1 Pedro está dirigido a los cristianos de Asia Menor, la mayoría de los cuales eran gentiles y tenían un pasado en el paganismo.
Propósito
En su libro Daily Study Bible [Biblia de estudio diario], William Barclay nos dice que esta epístola “Fue escrita por el amor de un pastor para ayudar a personas que enfrentaban esto [pruebas y persecución] y enfrentarían cosas peores en el futuro. Según Moffatt: ‘la idea central es animarlos a permanecer fieles y puros’. Además, E. J. Goodspeed escribe: ‘Primera de Pedro es una de las obras de la literatura de persecución más conmovedoras’. Y también es una de las cartas del Nuevo Testamento más fáciles de comprender” (p. 138).
La primera epístola de Pedro se enfoca en el sufrimiento y persecución de la Iglesia. Buscando animar y dirigir a los cristianos, el autor enfatiza en la libertad que Cristo traerá consigo cuando regrese a la Tierra. La certeza del regreso de Cristo es aquí una importante fuente de esperanza y consuelo, tal como en la carta de Pablo a los tesalonicenses (1 Tesalonicenses 4:18).
Capítulo 1
Pedro describe a sus destinatarios como “elegidos” —personas especialmente escogidas por Dios para servirle. También los llama “expatriados”, transeúntes en tierra extraña que esperan “una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible… preparada para ser manifestada en el tiempo postrero” (1:2-5). ¡Que herencia tan increíble van a recibir los cristianos!
Con esta maravillosa promesa de una herencia eterna en mente, Pedro insta a la conducta cristiana en el resto del capítulo, mencionando virtudes como la perseverancia, obediencia a la verdad y “el amor fraternal no fingido”.
Capítulo 2
Luego, Pedro continúa exhortando a sus lectores al crecimiento y desarrollo espiritual, a “desechar” (2:1) todo lo que perjudique la salud espiritual de nuestra vida cristiana. Y concluye el capítulo recordando que Jesucristo es nuestro ejemplo a seguir (2:21-25).
Capítulo 3
Pedro nos habla acerca de la conducta apropiada dentro del matrimonio y la familia (3:1-7), y luego da más instrucciones con respecto a la vida cristiana (3:8-22).
Capítulo 4
Más adelante, Pedro nos instruye acerca de cómo vencer nuestras debilidades humanas aplicando principios de conducta bíblicos, como la oración sincera (4:7), el “ferviente amor” entre hermanos (4:8), la hospitalidad y el servicio (4:10-11). Además, insta a sus lectores a no sorprenderse del “fuego de prueba” y recordar el ejemplo de perseverancia que Cristo demostró en su sufrimiento (4:12-19).
Capítulo 5
Pedro da recomendaciones e instrucciones para los ancianos y les advierte acerca de su adversario, el diablo (5:1-9). Y, para concluir, el autor da más palabras de ánimo (5:10-14).
Síntesis de 2 Pedro
Temas principales:
- Advertencia contra los falsos ministros que al parecer había en la Iglesia.
- Perseverancia en la fe.
Capítulo 1
Pedro describe a sus destinatarios como los llamados por Dios a quienes Él da conocimiento de su verdad, así como “grandísimas promesas” destinadas a los “participantes de la naturaleza divina” (1:1-4).
Además fomenta el desarrollo del fruto del Espíritu Santo y nos insta a siempre recordar las enseñanzas de la Biblia (1:5-15).
También nos explica que todas las profecías son certeras, incluyendo la del regreso de Cristo (1:16-21).
Capítulo 2
El tema de este capítulo se asemeja al que Judas menciona en su libro. Pedro advierte acerca de los falsos profetas y sus engaños, y nos dice que no quedarán libres de castigo.
Capítulo 3
El autor insta a los cristianos a prepararse y estar listos para el regreso de Jesucristo y cuidarse de quienes se burlan de la certeza de su venida. El regreso de Cristo es absolutamente cierto y cambiará por completo el mundo y la sociedad que conocemos (3:1-10). Esta verdad debería motivarnos a “crecer en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo” (3:18).
1 Juan: síntesis
En 1 Juan vemos indicios de que la Iglesia estaba pasando por una división cuando este libro fue escrito. Tal parece que algunos miembros se estaban alejando de los demás para crear sus propias congregaciones (1 Juan 2:19), e intentaban atraer más adeptos de entre los hermanos (2:26). Y, como algunos versículos indican, esta epístola fue dirigida quienes permanecían fieles (2:1, 12-14, 19; 3:1; 5:1).
Capítulo 1
Juan enfatiza la importancia de la comunión entre hermanos (1:3-7) y de reconocer y confesar nuestros pecados (1:8-10).
Capítulo 2
El autor habla acerca de algunas de las características de un verdadero cristiano, como el guardar los mandamientos (2:3-6) y no amar al mundo (la sociedad), que es pasajero (2:15-17).
Capítulo 3
Juan nos da varias definiciones; explica que los cristianos son “hijos de Dios” (3:1-2) y el pecado es infracción de la ley (3:4). También da algunas características del verdadero amor cristiano (3:11.18) y habla acerca de cómo acercarnos a Dios con oración y obediencia (3:19-24).
Capítulo 4
Juan nos advierte acerca de los falsos ministros y nos enseña a reconocerlos (4:1-6). También nos muestra cómo saber si alguien tiene realmente el amor de Dios (4:7-10) y como practicar este amor divino (4:11-21).
Capítulo 5
Juan define nuevamente el amor de Dios (5:1-3). Luego nos insta a vencer la maldad del mundo (la sociedad) con fe, amor y obediencia (5:4-10) y a superar nuestras pruebas a través del poder de Dios (5:11-20). Por último, concluye con una advertencia acerca de la idolatría (5:21).
2 Juan: síntesis
Éste es un pequeño esquema de los temas que Juan trata en su segunda epístola:
- Saludos (1:1-3).
- El amor de Dios es “que andemos según sus mandamientos” (1:4-6).
- Siempre debemos cuidarnos de los “engañadores” (los que pueden hacernos errar) y estar firmes en la doctrina de Cristo para no ser engañados (1:7-11).
- Conclusión (1:12-13).
Síntesis de 3 Juan
En 3 Juan, el apóstol:
- Nos exhorta a “andar en la verdad” (1:1-4).
- Fomenta la hospitalidad (1:5-8).
- Describe a Diótrefes como alguien que sirve por intereses egoístas (1:9-10).
- Hace algunas observaciones finales (1:11-14).
Síntesis de Judas
El tema y propósito principal de esta la epístola es contrarrestar la amenaza de ciertos hombres que habían “entrado encubiertamente” a la Iglesia y “se esmeraban en convertir la gracia de Dios en una excusa para la inmoralidad descarada y en negar al único Dios verdadero y al Señor Jesucristo” (v. 4) (William Barclay, The Daily Study Bible [Biblia de estudio diario], p. 158). Veamos un pequeño resumen:
- Saludos y propósito (1:1-4).
- Descripción y castigo de los falsos maestros (1:5-16).
- Cualidades y atributos que caracterizan a los creyentes (1:17-23).
- Conclusión (1:24-25).
Buscad y hallaréis
En su amor y preocupación por nosotros, Dios nos ha dado su Palabra, la Biblia, para librarnos de problemas y dificultades. Y promete recompensar a quienes le busquen de todo corazón (2 Crónicas 7:14). Es más, Él mismo dice estar tocando a la puerta de nuestra mente (Apocalipsis 3:20).
Depende de cada uno de nosotros atender a ese llamado y buscar la verdad que nos llevará a la vida eterna.