Corea del Norte desafía a la comunidad internacional con su ensayo nuclear más potente
La primera denuncia acerca de un nuevo ensayo nuclear fue emitida por los sismólogos, quienes detectaron un temblor de 5.3 grados de magnitud, en la escala Richter, cerca del sitio de ensayos nucleares norcoreanos. Kim Jong-Un, líder de Corea del Norte, ha sido descrito por varios líderes mundiales como una gran amenaza por su maniática imprudencia y mentalidad agresiva. Afirman que sólo ganará más sanciones y aislamiento del resto del mundo por sus acciones bélicas.
El presidente Barack Obama advirtió que habrá “serias consecuencias”, mientras que la presidenta surcoreana, Park Geun-Hye, no contuvo sus palabras contra su vecino del norte. Japón también condenó el acto calificándolo como "absolutamente inaceptable" y la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) se refirió a la operación como "muy preocupante y lamentable".
"Nadie debería sorprenderse de que Corea del Norte continúe llevando a cabo ensayos nucleares para mejorar las capacidades de su creciente arsenal. Nadie debería esperar de China que resuelva el problema para Estados Unidos", declaró el experto Joel Wit. A pesar de las advertencias y proclamaciones de disgusto del mundo entero, Corea del Norte sigue erguida presumiendo sus avances.
¿Por qué las naciones sienten la necesidad de armarse y ensayar para la guerra? El apóstol Santiago nos dice que las guerras son el resultado de la avaricia y las pasiones humanas de los gobernantes que dirigen las naciones del mundo. “¿De dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No es de vuestras pasiones, las cuales combaten en vuestros miembros? Codiciáis, y no tenéis; matáis y ardéis de envidia, y no podéis alcanzar; combatís y lucháis, pero no tenéis lo que deseáis, porque no pedís. Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites” (Santiago 4:1-3).
Sólo Dios puede acabar con las guerras. Cuando Jesucristo regrese a la tierra, con todo su poder y su gloria, se acabarán los conflictos internacionales. Él pondrá fin a todas las guerras en el mundo.
El profeta Miqueas dice lo siguiente acerca de ese futuro próximo: “Vendrán muchas naciones, y dirán: Venid, y subamos al monte de Jehová, y a la casa del Dios de Jacob; y nos enseñará en sus caminos, y andaremos por sus veredas; porque de Sion saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra de Jehová. Y él juzgará entre muchos pueblos, y corregirá a naciones poderosas hasta muy lejos; y martillarán sus espadas para azadones, y sus lanzas para hoces; no alzará espada nación contra nación, ni se ensayarán más para la guerra. Y se sentará cada uno debajo de su vid y debajo de su higuera, y no habrá quien los amedrente; porque la boca de Jehová de los ejércitos lo ha hablado. Aunque todos los pueblos anden cada uno en el nombre de su dios, nosotros con todo andaremos en el nombre de Jehová nuestro Dios eternamente y para siempre” (Miqueas 4:2-5).
¡Que llegue pronto ese tiempo de paz tan anhelado!
Lo invitamos a leer “La paz mundial: Cómo vendrá” y “No se adiestrarán más para la guerra”.
Fecha de publicación: Septiembre 27, 2016
