¡Giro a la derecha!
Giro a la derecha. Giro a la izquierda. Giro a la centro-izquierda. Giro a la centro-derecha. Giro a la izquierda moderada. Etcétera.
Al mencionar estos términos ya los lectores saben de qué estamos hablando: estamos hablando de los gobiernos modernos en este mundo.
Es de todos sabido que el señor Barak Obama ejerció durante ocho años consecutivos como presidente de los Estados Unidos y logró administrar un gobierno con tendencias socialistas —de izquierda. Esta semana el señor Obama presentó a la nación su último discurso como presidente y le seguirá otro presidente con ideas de gobierno bastante contrarias. Todo el mundo está nervioso por ese “giro a la derecha”.
En el Mundo Occidental podemos ver de manera cíclica los giros de un sistema de gobierno a otro en su intento por llegar algún día al gobierno ideal. En la década pasada muchos de los países de América Latina optaron por sistemas de gobierno de izquierda, especialmente al socialismo, en donde supuestamente la idea principal es que eventualmente la riqueza sea distribuida equitativamente entre todas las personas. Para lograr esto, hay que cobrar los impuestos altos a los que trabajan y subsidiar a las personas que “no encuentran trabajo”. Como resultado de esta forma de gobernar, muchas personas han optado por no trabajar y vivir con el subsidio que reciben del Estado, algunas veces dependiendo del número de miembros en la familia. A mayor número de miembros en la familia mayor será el subsidio. Esto no solamente ha frenado la productividad en esos países, sino también ha aumentado el número de hijos en las familias porque el Estado los “ayudará”. En la mayoría de estos casos el Estados ha quedado bastante endeudado y con una economía en ruinas.
También este sistema ha provocado que las personas productivas no quieran ser tan productivas porque pagarán altos impuestos para poder subsidiar a los que “no encuentran trabajo”. También están las personas que producen y que tratarán de evitar a toda costa —en especial en Latinoamérica— pagar los impuestos completos que el gobierno les exige. Además los empresarios, al ver que los impuestos aumentan para ellos y que muchas personas no querrán trabajar debido a los subsidios que reciben, prefieren llevar su dinero a otros países donde el sistema de gobierno sea más “justo”.
Como decía, los gobiernos de izquierda han proliferado en muchos países de América, en especial en la década pasada: Estados Unidos, México, Nicaragua, Venezuela, Ecuador, Chile, Bolivia, Argentina, Brasil, etcétera. Dentro de los anteriores ejemplos ha habido gobiernos de “izquierda”, de “centro izquierda”, de “izquierda moderada”…y más izquierdas.
En los últimos años algunos de esos países piensan que ahora lo correcto es girar “a la derecha”, a la “centro derecha”, a la “derecha moderada”…o a más “derechas”. Y básicamente este sistema de gobierno es, por supuesto, “lo opuesto de la izquierda”. Sea lo que ello signifique.
Estados Unidos, Argentina y Brasil han dado ya un “giro a la derecha” y todo parece indicar que otros países del área quieren hacer lo mismo.
¿Será este “giro a la derecha” el camino hacia el gobierno correcto? ¿Será este sistema realmente lo que a todos nos gustaría tener: con justicia social, necesidades básicas satisfechas, con la contaminación ambiental resolviéndose, con la deudas nacionales pagándose, con los impuestos bajando, con la economía estabilizándose, etcétera? Lo más probables es que dentro de algún tiempo estos mismos países querrán dar otra vez “un giro a la izquierda”. Y así han estado experimentando los seres humanos por milenios en la búsqueda del gobierno ideal…pero no llega ese gobierno…pero llegará.
La buena nueva es que pronto terminará esta incansable búsqueda del gobierno correcto. Pronto terminarán lo giros de izquierda a derecha y viceversa. La gente ya está mareada de tantas vueltas de un lado hacia el otro. Cristo regresará a la tierra —lo queramos entender o no— y establecerá el gobierno correcto que todos estamos esperando y anhelando. Veamos lo que dice Dios mismo:
Apocalipsis 11: 15-18 “El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos. Y los veinticuatro ancianos que estaban sentados delante de Dios en sus tronos, se postraron sobre sus rostros, y adoraron a Dios, diciendo: Te damos gracias, Señor Dios Todopoderoso, el que eres y que eras y que has de venir, porque has tomado tu gran poder, y has reinado. Y se airaron las naciones, y tu ira ha venido, y el tiempo de juzgar a los muertos, y de dar el galardón a tus siervos los profetas, a los santos, y a los que temen tu nombre, a los pequeños y a los grandes, y de destruir a los que destruyen la tierra”.
¡Pidamos a Dios fervientemente que venga pronto ese reino!
En nuestra sección “El Reino de Dios” usted encontrará una variedad de temas relacionados que seguro le ayudará a comprender más ampliamente acerca del Reino de Dios.
Fecha de publicación: Enero 12, 2017