La carrera hacia la Casa Blanca
La carrera estadounidense hacia la Casa Blanca ha captado el interés mundial a través de los debates y los ataques entre demócratas y republicanos; incluso se han visto ataques entre candidatos de un mismo partido. Pareciera que la ética y el juego limpio no aplican cuando está en disputa el puesto más codiciado y poderoso del mundo—la silla del Presidente de los Estados Unidos en el Despacho Oval de la Casa Blanca.
La inusual aparición del presidente Obama ante las cámaras en la Casa Blanca para hablar del actual estado del país, justo cuando los demócratas y los republicanos pelean por conseguir el apoyo de los estados de la unión americana para la nominación presidencial, muestra la preocupación del presidente por la forma en que han estado criticando su presidencia como negativa y su liderazgo como deficiente.
A pesar de sus elocuentes argumentos y su intento de mostrar en cifras cómo el desempleo cayó a su nivel más bajo en ocho años, las recientes encuestas realizadas en diferentes estados muestran que más de la mitad de la población estadounidense tiene una perspectiva muy negativa y pesimista sobre el futuro económico del país. Los ciudadanos observan la caída de la bolsa y del precio del petróleo y se preguntan: ¿Qué está sucediendo realmente en nuestro país y en el mundo? ¿Por qué tanta violencia, desigualdad, pobreza e inquietud social?
Por otro lado, las constantes amenazas de grupos terroristas a Estados Unidos es otra de las grandes razones por las que ahora muchos norteamericanos están volteando sus ojos hacia otras opciones políticas en busca de alguien que traiga un cambio radical a su triste situación. ¿Podrá un nuevo líder traer cambios positivos a un país endeudado con más de 18 trillones de dólares? ¿Podrá algún líder implementar políticas radicales para traer cambios positivos a un país en problemas? ¿Quién será el siguiente líder del país más poderoso del mundo? Y más importante, ¿acaso podrá darle un vuelco a la situación política, económica y social del país? ¿En que nos afecta esto a nosotros en Latinoamérica?
Cuando Estados Unidos tiene problemas, a nosotros en Latinoamérica nos afecta aun mas. Por eso debemos saber lo que esta pasando en el país más poderoso de la tierra.
Dios es quien tiene el verdadero poder. El es quien pone y quita a los líderes según su voluntad. Esta es una de las grandes lecciones que le enseñó Dios al líder más poderoso que este mundo ha visto jamás, el rey Nabucodonosor.
Un día el rey Nabucodonosor se jactaba en su palacio por todo lo que había hecho: “¿No es ésta la gran Babilonia que yo edifiqué para casa real con la fuerza de mi poder, y para gloria de mi majestad? Aún estaba la palabra en la boca del rey, cuando vino una voz del cielo: A ti se te dice, rey Nabucodonosor: El reino ha sido quitado de ti; y de entre los hombres te arrojarán, y con las bestias del campo será tu habitación, y como a los bueyes te apacentarán; y siete tiempos pasarán sobre ti, hasta que reconozcas que el Altísimo tiene el dominio en el reino de los hombres, y lo da a quien él quiere” (Daniel 4:30-32).
Dios nos enseña que él tiene el dominio de todos los gobiernos del mundo y sólo él puede bendecir a las naciones por su obediencia o maldecirlas por su desobediencia. Si las naciones obedecieran la voz de Dios para guardar y poner por obra todos sus mandamientos, él las exaltaría sobre todas las naciones de la tierra y serían bendecidas (Deuteronomio 28:1-2). El bienestar de las naciones no es consecuencia de su capacidad económica o del liderazgo de algún político. El bienestar estriba en la obediencia a las leyes de Dios y en reconocer qué él es el único, supremo y máximo poder del universo y que tiene el dominio en el reino de los hombres.
Para entender más acerca de este tema, le invitamos a leer nuestro articulo ¿Qué le va a suceder a Estados Unidos?.
Fecha de publicación: Febrero 17, 2016