Medite en estas cosas: “Todo lo que es honesto”
El segundo aspecto en el cual debemos meditar, de acuerdo a Filipenses 4:8, puede ser un gran desafío, ya que la honestidad es muy difícil de encontrar hoy en día. ¿Cómo podemos meditar en lo que es honesto?
En nuestra anterior publicación acerca de esta serie, aprendimos que meditar sobre todo lo que es verdadero puede tener un gran beneficio para nuestro bienestar general. Sin embargo, si dejamos este primer concepto solo, podríamos estar en problemas.
“Todo lo que es verdadero” puede incluir cosas que son negativas, pero técnicamente ciertas. Aprender todos los detalles reales sobre los tiroteos masivos en los colegios, sería aprender la verdad, pero ¿deberíamos hacerlo? Aprender todos los motivos e impulsos verdaderos de los dictadores y tiranos sería aprender la verdad sobre ellos, pero ¿nos beneficiaría enfocar nuestra meditación en eso? Aprender cada verdad sobre los genocidios monstruosos y sangrientos de la historia podría llevarnos a una oscura depresión.
A veces tenemos que centrarnos en el lado feo de lo que es verdad para poder entender nuestro mundo con precisión. Pero hay algo más que sólo meditar sobre cosas que son verdaderas.
El siguiente elemento en el cual Pablo nos dice que “meditemos” en Filipenses 4:8 es en “todo lo honesto”. Esto ayuda a enfocar nuestra mente en meditar en cosas verdaderas, pero que también sean honestas.
¿Qué significa honesto?
Es interesante que Pablo les pidiera a los filipenses que meditaran en lo honesto, inmediatamente después de decirles que meditaran en lo verdadero. El apóstol está dirigiendo nuestra meditación hacia la verdad, pero la verdad honesta.
Honesto también puede traducirse como decente, recatado, razonable, honrado o justo. Entonces, cuando meditamos en la verdad, debemos enfocar la mayor parte de nuestro pensamiento en cosas que merecen respeto. Si pensamos en las personas, debemos pensar en ejemplos de integridad y honor.
Esto puede ser tan fácil como cambiar nuestro enfoque. Miremos algunos ejemplos:
Cuando meditamos en la verdad, debemos enfocar la mayor parte de nuestro pensamiento en cosas que merecen respeto.
- Imagínese meditar sobre la valentía de Ruby Bridges, una niña de 6 años (la primera niña afroamericana en asistir a una escuela de “blancos”), entrando a una escuela segregada en 1960, con gente enojada escupiéndole y llamándola con nombres horribles. Podemos centrarnos en la fortaleza y la valentía de esa niña, en lugar de las personas enojadas y equivocadas que se burlaron de ella.
- Imagínese meditar sobre los ejemplos de personas que se sacrifican para ayudar a otros después de los desastres naturales y otras catástrofes, en lugar de centrarse en los horribles detalles de la catástrofe en sí.
Una vez más, tenemos que ser conscientes de las verdades feas y, por necesidad, meditar sobre ellas a veces, pero no debemos mantener nuestra mente en eso durante largos períodos de tiempo.
Pensar mal hace que nos concentremos en lo peor de todo, en lugar de lo noble y honesto. Este tipo de pensamiento puede paralizarnos con ansiedad y depresión, en lugar de infundirnos esperanza y pensamientos piadosos.
Examinemos algunas formas en que podemos pensar y hablar lo que es honesto.
1. Pensar lo que es honesto.
Para pensar lo que es honesto, esfuércese por evitar:
- Las noticias 24/7. No nos malinterpreten. No estamos abogando para que las personas ignoren las noticias del mundo que nos rodea. Los cristianos son instruidos para que observen los acontecimientos en el mundo. Pero, ver las noticias no significa estar sintonizado cada segundo del día. Parte del modelo comercial de los programas de noticias es proporcionar un flujo constante de historias aterradoras o indignantes para mantener a la gente enganchada.
Los investigadores que trabajan para las cadenas de noticias desarrollan estrategias para mantener a la gente mirando y así vender publicidad. Ellos saben que el miedo y la indignación mantienen a la gente enganchada. Tienen un interés creado en hacer que no veamos nobleza y honestidad en las noticias, por una ganancia de miles de millones de dólares al año. - Sumergirse en las profundidades de la depravación de los seres humanos. Las personas pueden ser terriblemente malas, especialmente en situaciones horribles. Una vez que obtengamos los datos necesarios, puede ser peligroso insistir en cada horrible acto de pecado que los humanos cometen unos contra otros. Estos actos no son nobles ni honorables en absoluto, y no se les debe dar un lugar significativo en nuestras mentes.
Para pensar lo que es honesto, esfuércese por abrazar:
- Historias inspiradoras de triunfos sobre la adversidad, ayudar a otros incluso en situaciones de pérdidas personales y hacer lo correcto incluso en situaciones terribles. Si sentimos que el mundo es horrible e injusto, debemos enfocar nuestras mentes en los puntos brillantes de él, que son tan fáciles de olvidar. Básicamente, esto significa buscar a los buenos samaritanos en nuestro mundo (Lucas 10:25-27). El hecho es que ellos existen en todas las razas y naciones.
- Profundizar en las enseñanzas bíblicas sobre lo que significa vivir una vida noble de integridad y honestidad. Esto incluye aprender a ser sobrio, serio y prudente (Tito 2:2; 1 Timoteo 3:8, 11). Puede ser muy útil leer y meditar sobre los numerosos proverbios que exponen el cómo y el porqué de hacer lo que es correcto y honesto.
También es fundamental estudiar la honestidad en la vida de Jesucristo. Esto es en lo que queremos estar pensando para usarlo como un modelo de nobleza y honestidad para nuestras propias vidas. Para aprender lecciones de la vida de Cristo, tal vez desee consultar nuestra actual serie de la revista Discernir "Andar como Él anduvo".
2. Hablar lo que es honesto.
Para hablar lo que es honesto, evite:
- Largas discusiones con los demás, repitiendo todo lo que es terrible de nuestro mundo. Los festivales de quejas donde arrojamos todo lo que no está bien en el mundo y en nuestras vidas, rara vez hacen algo para cambiar positivamente las cosas.
El mundo tiene muchas cosas malas, pero discutir y enfocarnos incesantemente en esas cosas no nos ayudará a pensar como Dios, ni mucho menos a irradiar un cristianismo positivo. Tenemos que reconocer que nuestro mundo no tiene arreglo, y discutir interminablemente sus males no lo arreglará. Solo Dios puede arreglarlo. - Compartir noticias tristes o trágicas como una forma de iniciar una conversación. No hay nada que pueda desbaratar una actitud de esperanza y nobleza más rápido que escuchar algo horrible que sucedió. Evitar esto, no es esconder la cabeza en la arena, sino evitar deliberadamente usar la tragedia como entretenimiento.
Una clásica canción de los años 80 de Don Henley, Dirty Laundry, critica cómo las noticias hacen esto, al decir que necesitan "llevar a la viuda al set" y que los presentadores pueden "hablar sobre un accidente aéreo con un brillo en sus ojos". Las situaciones trágicas deben tomarse con seriedad y no compartirse ni bromear como que fuera el clima. Los eventos trágicos de nuestro mundo deben ser vistos con sobriedad y dolor, no compartidos para obtener “likes” o provocar una discusión.
Para hablar lo que es honesto, abrace:
- Compartir historias de cosas alentadoras e inspiradoras, en lugar de sólo las dificultades de nuestra vida. Esto no quiere decir que nunca compartamos lo que nos molesta (algo necesario para que otros puedan tener oportunidades de ser nobles y honestos). Pero sí significa que debemos tener una perspectiva general para hablar lo que es edificante para los demás (Efesios 4:29). En otras palabras, debemos hablar de lo que edifica y anima a los demás.
Hable de los vecinos que le ayudan. Comparta noticias que destacan a personas que se comportan positivamente y ayudan a los demás. Hable sobre las personas que ayudan a los menos afortunados y de las formas en que las personas pueden ayudar a los demás. - Hablar de los demás de manera noble y honesta, evitando chismes y ataques sarcásticos sobre su carácter o debilidad. Debemos asegurarnos de ser siempre los animadores, mentores y entrenadores de los demás, en lugar de ser los detractores y susurradores que los critican. Para obtener más información sobre cómo superar los chismes, lea “El dominio de la lengua: ¿qué opina Dios del chisme?”.
Haga lo que es honesto
Cuando pensamos y hablamos sobre lo verdadero y que es además honesto, nos ayuda a guiar nuestras acciones. Vivir con honesta integridad es ser como los Ruby Bridges del mundo, no como las multitudes enfadadas y gritonas. Vivir con honestidad y nobleza significa ayudar a los necesitados, defender a las personas que están siendo acosadas y tratar a todos de la manera en que queremos que nos traten (Lucas 6:31).
Al vivir de esta manera, seguimos el ejemplo de Cristo (1 Corintios 11:1) y demostramos el fruto del Espíritu Santo (Gálatas 5:22-23).
Meditar en lo que es honesto
Entonces, ¿en qué verdades debemos meditar? ¿Pasamos más tiempo en la verdad fea que puede convertir nuestras vidas en un vórtice de negativismo, o en la verdad motivacional que nos ayudará a vivir vidas más nobles y honestas? La primera inevitablemente nos llevará a más ansiedad y depresión. La segunda nos llevará a la esperanza y la acción positiva.
Para ver la primera parte de esta serie, lea "Medite en estas cosas: ‘Todo lo que es verdadero’”.
Fecha de publicación: Agosto 10, 2022