No olvide recordar el sábado

por Erik Jones
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Todos olvidamos cosas, incluso cuando se nos dice que las recordemos. ¿Podría estar usted olvidando lo que Dios dijo que debemos recordar y santificar: su día de reposo?

Para mí, uno de los sentimientos más desagradables de la vida es ese momento en el que me doy cuenta de que:

¡Me olvidé de… [complete el espacio en blanco]!

Pueden ser pequeñas cosas, como estar a medio camino del trabajo y darme cuenta de que olvidé mi teléfono en mi mesita de noche —de hecho, me ha ocurrido.

Y pueden ser cosas importantes, como levantarse por la mañana y darse cuenta de que usted tenía un compromiso para hablar con alguien el día anterior y que se le olvidó. O sentarse en un terminal del aeropuerto esperando su vuelo y estar tan envuelto en algo que se olvida levantarse y abordar su avión y pierde su vuelo. (Sí, a este autor le pasó una vez).

No hay sentimiento que se compare con esa sensación de hundimiento en el estómago cuando olvidamos algo importante... y ya es demasiado tarde para hacer algo al respecto.

Una de las debilidades del ser humano es la propensión a olvidar.

Según varias encuestas, algunas de las cosas que la gente probablemente olvidará son: 

• Lo que ellos fueron a buscar a una habitación.  
• Dónde dejaron sus llaves.
• Sacar la ropa de la lavadora o secadora.

El olvido también puede ser una gran oportunidad de negocio para algunos, desde la fabricación y venta de notas adhesivas (diseñadas específicamente para combatir el olvido) hasta aplicaciones y software de recordatorio en los teléfonos celulares.

El olvido puede ser frustrante y (a veces) divertido. Pero hay otra cosa que la mayoría de la gente en nuestro mundo olvida y que es un asunto mucho más serio.

De hecho, es una de las pocas cosas en la Biblia que Dios dice específicamente que no olvidemos.

Un breve cuestionario

Antes de ver el evento que realmente es lo más olvidado, realicemos un breve cuestionario.

1. ¿Puede usted nombrar los Diez Mandamientos que se encuentran en la Biblia?
2. ¿Cuál es el único mandamiento (dentro de los diez) que Dios nos exhorta específicamente a "recordar"?

¿Cómo le fue?

En lugar de darle las respuestas, aquí hay referencias bíblicas para ayudarlo a encontrar las respuestas correctas a las dos preguntas anteriores:

1. La respuesta se encuentra en Éxodo 20: 1-17. (O puede buscar en la lista aquí).
2. Otra parte de la respuesta se encuentra en Éxodo 20:8.

"Recuerda el sábado"

Si no está muy familiarizado con la Biblia, es posible que se haya sorprendido al leer la respuesta a la segunda pregunta. Puede que haya leído o escuchado el Cuarto Mandamiento muchas veces pero, ¿se ha fijado en el verbo que se encuentra sólo en uno de los Diez Mandamientos: “Acuérdate del día de reposo para santificarlo”?

La palabra hebrea traducida como "recordar" en nuestras Biblias es zakar. Esencialmente, esta palabra significa llamar a la memoria, registrar o marcar (Concordancia Strong Exhaustiva). Cuando Dios dio el cuarto mandamiento, básicamente dijo:

No olvide esto, marque esto, ¡recuerde específicamente esto!

Esta orden de Dios debería hacer que nos sentemos y tomemos nota. Si el Creador de todas las cosas enfatiza algo: absolutamente, positivamente, no olvides esto, probablemente deberíamos prestar atención, ¿no es así?

Pero, de los Diez Mandamientos, ¿cuál es el más ignorado universalmente? ¿Cuál es el mandamiento que la mayoría de las personas religiosas ni siquiera intenta recordar?

La respuesta es muy sencilla: el cuarto mandamiento.

El único mandamiento que comienza con la instrucción específica de recordar es el mismo que la mayoría de la gente olvida, o elige ignorar.

Tres cosas para recordar acerca del día de reposo

Aquí hay tres hechos esenciales acerca del mandamiento del sábado en los que debemos considerar pensar profundamente:

1. Recuerde que el sábado es el séptimo día de la semana.

El origen del sábado se encuentra en el relato de la creación en Génesis. Después de crear los diversos componentes de la vida en el planeta Tierra, Dios “descansó el séptimo día de toda la obra que había hecho” (Génesis 2:2, énfasis añadido). Después de descansar (cesando de su obra creativa), “Dios bendijo el séptimo día y lo santificó” (v. 3).

El séptimo día de la semana no es como cualquier otro día. Ha sido bendecido y apartado por Dios desde este momento registrado en Génesis 2.El séptimo día de la semana no es como cualquier otro día. Ha sido bendecido y apartado por Dios desde este momento registrado en Génesis 2."Bendecir" y "santificar" significa que Él lo apartó como santo para un propósito especial. El cuarto de los Diez Mandamientos apunta hacia lo que ya había sido declarado santo y apartado. Dios reforzó el tiempo específico: “el séptimo día es reposo para el Eterno tu Dios” (Éxodo 20:10).

El séptimo día corresponde al día moderno que llamamos sábado. En realidad, comienza al atardecer del viernes y continúa hasta el atardecer del sábado.

En ninguna parte de la Biblia se deroga o transfiere el día de reposo a cualquier otro día de la semana.

Algunos creen que el sábado se cambió del séptimo día al primer día de la semana. Para obtener más información acerca de los problemas con esa idea, lea nuestro artículo: “¿Fue el sábado reemplazado por el domingo?".

2. Recuerde que el día de reposo es para los cristianos.

Una creencia común en la corriente principal del cristianismo es que el cuarto mandamiento es judío, mientras que guardar el domingo (o ningún día) es cristiano. Pero una mirada honesta al registro del Nuevo Testamento muestra que el séptimo día, sábado, es completamente cristiano.

Aquí hay tres puntos que prueban esto:

• Jesucristo observó el sábado (Lucas 4:16-31).
• Jesucristo enseñó directamente que ni la más mínima porción de la ley de Dios "pasaría", y que quien "quebrante" o "enseñe" en contra de cualquiera de los mandamientos de Dios “muy pequeño será llamado" en el Reino de Dios (lea atentamente Mateo 5:17-19).
• Jesucristo enseñó que el sábado fue creado para la humanidad (no sólo para los judíos) y se declaró a sí mismo “Señor del sábado” (Marcos 2:27-28).

¿Qué es más cristiano que el sábado —Jesús mismo dijo que fue "hecho para el hombre" y Él es "Señor del sábado"?

Para obtener más información acerca de las enseñanzas de Jesús en relación al día de reposo, lea "¿Conoce al Señor del sábado?".

3. Recuerde que el sábado es una bendición, no una carga.

Eche un vistazo más de cerca a las palabras de Jesús en Marcos 2:28. Él dijo que el sábado fue hecho para el hombre (personas).

Dios dijo que el sábado fue hecho para el hombre (personas).¡Dios creó el sábado como un beneficio o un regalo para las personas! Considere lo que es el sábado. Es un período de 24 horas de cada semana en el que Dios nos ordena que bajemos la velocidad, hagamos una pausa y descansemos. Descansar es algo bueno. Incluso la ciencia moderna ha descubierto que tomarse un día de cada semana para descansar, física y mentalmente, tiene grandes beneficios para la salud. Dios no nos creó para trabajar y estar activos sin parar. Sí, Dios creó nuestros cuerpos para que necesitaran dormir por la noche, pero también creó nuestros cuerpos y mentes para que necesitaran descanso y refrigerio semanal.

Descansar el sábado no significa que los observadores del sábado permanezcan en la cama desde la puesta del sol del viernes hasta la puesta del sol del sábado. Descansar puede incluir dormir, pero no sólo significa dormir. Los guardadores del sábado descansan física, mental y emocionalmente en éste día. Ellos:

• Reducen su ritmo.
• Intentan disfrutar de algunas de las cosas más tranquilas y relajantes de la vida para las que no se tienen tiempo en días normales.
• Recargan sus "baterías" espirituales mediante la oración y el estudio de la Biblia.
• Pasan más tiempo con su familia y amigos.
• Se reúnen para adorar formalmente y aprender de Dios en los servicios de la Iglesia.

Aquellos que descansan el sábado cada semana han aprendido que este día es una bendición increíble. Aman el sábado de Dios y todos los beneficios que trae. No quieren olvidarlo. Lo consideran un día de rejuvenecimiento espiritual y físico.

Las personas que están detrás de Vida, Esperanza y Verdad toman muy en serio la advertencia de recordar el día de reposo. Nos esforzamos por recordar y guardar el sábado, no sólo porque se nos advierte que no lo olvidemos, sino porque creemos que es una ley esencial para nuestra vida espiritual y un beneficio para nuestra salud física y emocional.

El sábado no es una carga, sino una bendición, una bendición que nos encanta compartir con los demás. 

Para obtener más información acerca de cómo observar el día de reposo y aprovecharlo al máximo, lea "¿Cómo debería guardar el sábado un cristiano verdadero?".

Un desafío para empezar a recordar el día de reposo

Aunque la mayoría de los habitantes de este mundo olvidan el día de reposo, ¡usted puede elegir recordarlo!

Pero no basta con recordarlo. También debemos mantenerlo. En otras palabras, debemos reconocer su importancia y realmente descansar y observarlo. Para la mayoría de las personas que guardan el sábado, este día es el punto culminante de la semana. Esperan ansiosamente cada semana a que se ponga el sol el viernes por la tarde debido al gozo, el descanso y el rejuvenecimiento que trae el día santo.

El sábado, cuando se integra adecuadamente en la vida de una persona, no sólo brinda descanso físico y rejuvenecimiento al final de la semana, sino también nos ayudará a comprender mejor a Dios y su forma de vida. Al descansar y observar el día, llegaremos a comprender que éste es una “delicia” (Isaías 58:13), ¡no una carga!

¿Está usted listo para dejar de olvidar lo que Dios dice que recuerde?

Fecha de publicación: Enero 6, 2022