¿Tiene la publicidad siempre la razón?
Ha sido sorprendente para todo el mundo el hecho de que el señor Donald Trump haya sido electo Presidente de los Estados Unidos. Los mercados mundiales han reaccionado con más incertidumbre a esta decisión que al propio Brexit, cuando Inglaterra decidió salir de la Unión Europea el año pasado.
Esta decisión que ha tomado por sorpresa a casi todos los países de occidente se debe en parte a la publicidad que predecía el éxito de la candidata contrincante, de la misma manera que la misma prensa predijo el fracaso del Brexit y sucedió todo lo contrario.
Creo que todos deberíamos aprender algunas lecciones de este evento.
En primer lugar debemos decir que la prensa y la publicidad tienen mucho poder para manipular los pensamientos de las personas, pero no siempre tienen la verdad. Desde el comienzo de la campaña electoral de Estados Unidos, la mayoría de los periódicos, la mayoría de los canales de televisión, la mayoría de los políticos y la mayoría de los actores y actrices que tienen tanta influencia en el país norteamericano, todos predijeron lo contrario de lo que sucedió. La mayoría de los canales de publicidad son propiedad de un mundo liberal que avanza rápidamente y que rechaza todo aquello que huele a reglas, a leyes y a orden. De ninguna manera estamos diciendo con esto que un candidato es mejor que el otro. Simplemente estamos diciendo que todo aquellos que huele a liberal es lo que tiende a publicitarse más.
En segundo lugar, el hecho de que las personas que hablan mucho y que hacen alboroto en relación a sus ideales no quiere decir que tienen la razón. Es muy posible que los que menos hablan, menos alardean y menos participan en la política son los que tienen la razón. De hecho, la Biblia le llama a la Iglesia de Dios: Manada pequeña. Esta manada pequeña no participa en la política ni debe alardear de nada, pero Dios dice que eventualmente será esta minoría quien implantará, bajo Jesucristo, un gobierno justo sobre la tierra. Por lo tanto tenemos que aprender la lección de que no podemos dejarnos llevar ni por las apariencias, ni por la mayoría ni por la publicidad. Como bien dice el dicho: Las apariencias engañan. Cada uno de nosotros tenemos la responsabilidad de investigar, de discernir y de razonar cuidadosamente antes de emitir un juicio o tomar decisiones.
Finalmente, hemos visto que la política casi siempre es sucia, independientemente del país y las personas en el mundo que hacen política, usan a la prensa y a la publicidad para conseguir sus ideales, hacen manifestaciones a favor de un candidato y en contra del otro. Hablan mal del candidato que no quieren y hablan maravillas del candidato de su preferencia, pero todos olvidan que Dios esta ultimadamente a cargo.
Ciertamente Satanás gobierna y engaña al mundo entero, pero aun este ser malvado está sujeto al Dios Todopoderoso. Dios está llevando a cabo un plan aquí abajo en la tierra. El permite que las cosas de acá abajo sucedan con el propósito de llevar a cabo su plan. Dios permite ultimadamente que un candidato sea elegido como presidente de un país para que lleve a cabo su propósito supremo. Como bien dice la Biblia:
Daniel 2:20-22. “Y Daniel habló y dijo: Sea bendito el nombre de Dios de siglos en siglos, porque suyos son el poder y la sabiduría. Él muda los tiempos y las edades; quita reyes, y pone reyes; da la sabiduría a los sabios, y la ciencia a los entendidos. El revela lo profundo y lo escondido; conoce lo que está en tinieblas, y con él mora la luz”.
También Daniel 4:17. “La sentencia es por decreto de los vigilantes, y por dicho de los santos la resolución, para que conozcan los vivientes que el Altísimo gobierna el reino de los hombres, y que a quien él quiere lo da, y constituye sobre él al más bajo de los hombres”.
Usted y yo debemos evitar participar en la política, pero al mismo tiempo debemos tener la convicción de que Dios está en control de todo lo que sucede acá abajo en la tierra.
Les habló Saúl Langarica para Vida, esperanza y verdad.