Aumentan la pobreza y la desigualdad por efecto de la pandemia

por Sergio Carvajal - Julio 21, 2021

La pandemia ha provocado un aumento de la pobreza, la desigualdad y el desempleo, pero también ha provocado un enorme aumento de multimillonarios en Latinoamérica y en el mundo. ¿En dónde están la justicia y la equidad?

Una noticia de la BBC Mundo mencionó que durante la presente pandemia creció aún más el gigante abismo entre los más pobres y los dueños de las grandes fortunas en Latinoamérica.

La constante competencia de querer ser parte de la lista Forbes se ha convertido en un punto de referencia y estatus de poder e influencia. Forbes es la revista especializada en el mundo de los negocios y las finanzas y es publicada en Estados Unidos. Cada año se publica la lista de todos aquellos que cuentan con las más grandes fortunas personales en el mundo.

Durante la pandemia, en Estados Unidos se registró una explosión de nuevos multimillonarios que poseen fortunas personales sobre 1.000 millones de dólares. En lo que va del 2021, el aumento de nuevos multimillonarios subió un 86 por ciento respecto al inicio del 2020, quedando en el ranking de los cinco más multimillonarios del mundo Jeff Bezos (fundador de Amazon), Elon Musk (fundador de Tesla), Bernard Arnault (propietario del grupo de artículos de lujo LVMH), Bill Gates (fundador de Microsoft) y Mark Zuckerberg (creador de Facebook). Forbes también subraya que hay 493 nuevos nombres en su lista del 2021, es decir, se produjo un multimillonario nuevo cada 17 horas.

En Latinoamérica, la lista Forbes quedó compuesta por 51 multimillonarios, encabezada por Carlos Slim (México) con una fortuna acumulada de US$ 62.800 millones. En segundo lugar, German Mota Velasco (México) con US$ 25.900 millones. En tercer lugar, está Iris Fontbona con US$ 23.300 millones (heredera del fallecido Andrónico Luksic Abaroa, de Chile).

¿Cuánto ha aumentado la pobreza durante la pandemia?

En el lado opuesto, en el último informe de la CEPAL se estimó que el total de personas pobres ascendió a 209 millones a finales de 2020, lo que significó 22 millones más de personas que el año anterior.

En su informe se concluyó que en el 2020 la pobreza y la extrema pobreza en Latinoamérica alcanzaron niveles que no se habían observado en los últimos 20 años.

Un empeoramiento similar se registró en los índices de desigualdad en la región y en las tasas de ocupación y participación laboral, sobre todo en las mujeres, debido a la pandemia.

Por su parte, la CEPAL informó que todo esto ha sucedido a pesar de las medidas de protección social de emergencia que los países han adoptado para frenar la crisis económica en sus países.

La ayuda social no cambia la pobreza

Durante los últimos meses se ha visto a varios gobiernos de América Latina prometer medidas de ayuda social para enfrentar las crisis económica que muchos están sufriendo. Esta ayuda no necesariamente ha llegado de manera efectiva a los más necesitados.

En Chile se realizaron retiros de los Fondos de Pensiones, por parte de los propios afiliados, a las administradoras de pensiones, como medida de autoayuda para enfrentar los problemas financieros de las familias. Esta ayuda no viene por parte del estado, sino de los ahorros que las propias personas han realizado durante toda su vida laboral para tener una jubilación.

Por otro lado, aunque algunos gobiernos realmente se han esforzado por entregar ayuda social, esto ha hecho que varias personas necesitadas se inclinaran a depender de esa ayuda, llevándolos a dejar de esforzarse por trabajar y producir, agravando aún más el camino hacia la recuperación económica de los países.

La compleja recuperación económica

Vale la pena mencionar la situación que está viviendo la banca privada, que se ha hecho aún más rica, producto de los créditos y sus altas tasas de interés, lucrando así con las desgracias de las personas que no les ha quedado otra opción que endeudarse. 

Entonces, ¿en dónde queda las búsqueda del bien común? Lamentablemente cada quien piensa en su propio provecho.

Muchas pequeñas y medianas empresas han quebrado, otras han recibido escasa ayuda por parte del estado y tampoco hay opciones de créditos blandos por parte de la banca privada. Condiciones así son las que provocan y siguen provocando el cierre de estas empresas que tratan, por diferentes medios, de sobrevivir.

Por otro lado, algunos países recientemente tuvieron elecciones, como Perú y Chile, y el ambiente en este medio es muy polarizado y también confuso. Muchas de las campañas políticas fueron y están inclinadas a promesas que son imposibles de cumplir, jugando así con las esperanzas de muchas personas.

Urge un gobernante justo

Algo tan básico como garantizar el pan y el vestido, es algo que Dios resolvió desde la creación. Algo tan básico como garantizar el pan y el vestido, es algo que Dios resolvió desde la creación. Cuando fue creado el primer ser humano sobre la Tierra, ya las leyes de Dios y sus mandamientos existían. Solamente Él se las entregó al hombre para que viviese por ellas y fuese bendecido. En nuestro artículo ¿Existían los Diez Mandamientos antes de Moisés? usted podrá descubrir que Dios reveló sus leyes desde un principio. Lamentablemente el hombre no ha querido obedecer y ahora la Tierra está quebrantada debido a que la humanidad busca sólo su bienestar personal y no el de los demás.

En Deuteronomio 10:18, nuestro Dios establece su perspectiva de cómo regir con equidad, garantizando el bienestar común: “Porque el Eterno vuestro Dios es Dios de dioses y Señor de señores, Dios grande, poderoso y temible, que no hace acepción de personas, ni toma cohecho; que hace justicia al huérfano y a la viuda; que ama también al extranjero dándole pan y vestido”. Sin embargo, la preocupación de los seres humanos es como lo dijera Martin Luther King: "Hemos aprendido a volar como los pájaros, a nadar como los peces; pero no hemos aprendido el sencillo arte de vivir como hermanos". Estas palabras son las que describen la realidad actual y se hacen más patentes a medida que el tiempo avanza.

Debemos entender que el mundo ya no tiene retorno. Sólo la venida del verdadero Rey de Reyes y Señor de Señores, nuestro Señor y Salvador Jesucristo, podrá traer la verdadera paz, equidad y justicia para toda la humanidad.

Sólo la venida de nuestro Señor y Salvador Jesucristo, podrá traer la verdadera paz, equidad y justicia para toda la humanidad.En Hebreos 1:8 el propio Dios Padre dice de su hijo Jesucristo: “Mas del Hijo dice: Tu trono, oh Dios, por el siglo del siglo; Cetro de equidad es el cetro de tu reino”.

¡Qué esperanza más grandiosa nos espera! Sólo Jesucristo quitará el poder a todos los gobiernos mundiales y establecerá el suyo propio. Sólo entonces habrá verdadera justicia y equidad por la eternidad. Vale mucho la pena esperar por ello.

Conozca más acerca de ese maravilloso gobierno futuro, descargando folleto gratuito titulado El misterio del reino de Dios.