Usted está invitado a un viaje

por Daniel Campos - Junio 18, 2021

La pandemia del Covid-19 devastó al sector turístico de todos los países. Todos los viajes fueron interrumpidos y aún hoy hay restricciones para trasladarse de un país a otro. Sin embargo, en Vida, Esperanza y Verdad queremos invitarlo a un viaje, el más extraordinario que usted haya hecho.

De pequeño me entretenía viendo en televisión a un artista infantil que cantaba una bonita canción que comenzaba diciendo: “El viajar es un placer, que nos suele suceder”. La canción era divertida, pero a esa edad no me imaginaba que un día el viajar sería una de mis actividades preferidas, ni tampoco entendía la importancia que tiene el sector del turismo en el desarrollo económico de muchos países. Mucho menos me imaginaba que un día descubriría la importancia que le da la Biblia a viajar.

Siga leyendo y descubra cómo viajar es una de las actividades que están profetizadas en la Biblia, ¡y los viajes seguirán existiendo en la humanidad en el futuro!

Un sector económico devastado

Desde abril de 2020 —y en algunos países desde antes— el turismo se ha detenido, en gran parte como resultado de las restricciones por la pandemia de COVID-19. Esta parálisis del sector de turismo no sólo ha afectado fuertemente a las economías de muchas naciones, sino también a muchas comunidades locales que viven, en buena proporción, de los ingresos del turismo. Diferentes gobiernos y el sector privado han tomado medidas para mitigar el impacto de la crisis en las empresas turísticas y sus trabajadores, así como prepararlos para la recuperación posterior a estas circunstancias.

Tal ha sido el impacto de esta parálisis financiera que la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), organismo de las Naciones Unidas, ha señalado que la caída del sector del turismo podría llevar a una disminución muy seria del crecimiento del PIB del Caribe y de América Latina.

Los viajes en la Biblia

Quizá el viaje más triste que haya hecho el hombre fue el que realizaron nuestros primeros padres hacia afuera del Jardín del Edén (Génesis 3:23-24). Desde aquella expulsión del Paraíso, la Biblia relata muchos viajes. Un habitante de Ur de los caldeos, Abraham, fue invitado por Dios a viajar a un lugar que ni siquiera conocía (Génesis 12:1). Con ese viaje comenzó la historia del único pueblo al que el Creador se le relevó en tiempos pasados. Los descendientes de Abraham siguieron viajando hasta que, por una hambruna, terminaron en Egipto, donde eventualmente fueron esclavos. La salida de Israel de Egipto se conoce como “el Éxodo” y este viaje por el desierto se relata en el libro que lleva ese nombre, el segundo libro de la Biblia. El “éxodo” fue uno de los viajes más largos que se conocen, pues duró 40 años.

Una vez asentados en la tierra prometida, el pueblo de Israel se dividió en dos naciones: la casa de Judá y la casa de Israel. Ambas naciones debieron emprender un largo viaje cuando fueron sacadas de su tierra. En 2 Reyes 17:6 se nos relata que la casa de Israel fue llevada cautiva por los asirios, en un triste viaje al sometimiento en tierra extraña, por el siglo VIII a.C. (Si desea saber acerca de la identidad de los asirios en la actualidad y cuál es el rol profético de esa nación en el futuro, solicite sin costo ni compromiso, nuestro folleto: “Cómo entender la profecía”).

La casa de Judá corrió igual suerte. Otro largo viaje de exilio los esperaba cuando fueron conquistados por Babilonia en el año 586 a.C. Estos viajes al exilio fueron viajes de tristeza y de pérdida. Pero la Biblia relata muchos otros viajes más, como el del profeta Jonás, que terminó engullido por un gran pez en su huida a la región de Tarsis (Jonás 1:3).

Jesús realizó muchos viajes, ¡y caminando! Viajar tenía un propósito para nuestro Salvador y lo realizó con asiduidad y constancia."En el Nuevo Testamento son famosos los viajes del apóstol Pablo. En la sección final de las Biblias modernas, suele haber mapas mostrando las grandes distancias y los lugares que recorrió el apóstol en sus viajes misioneros. También, los viajes a pie de Jesucristo son sorprendentes y están bien detallados en los evangelios.

Jesús realizó muchos viajes, ¡y caminando! Viajar tenía un propósito para nuestro Salvador y lo realizó con asiduidad y constancia.

Increíbles viajes profetizados

¿Seguirá habiendo “viajes” después que termine este sistema de gobiernos humanos, cuando ya esté gobernando Jesucristo y sus santos? La respuesta es un rotundo sí, ¡y esos viajes serán “obligatorios”!

Hay un significativo pasaje en el libro del profeta Zacarías. En los primeros versículos del capítulo 14 se nos relata el regreso del Mesías al Monte de los Olivos y cómo desde Jerusalén se establecerá un nuevo reinado mundial que transformará el sistema social, económico y religioso de la Tierra. A partir del versículo 16 se nos revelan los viajes que las naciones deberán hacer en ese futuro cercano. “Y todos los que sobrevivieren de las naciones que vinieron contra Jerusalén, subirán de año en año para adorar al Rey, al Eterno de los ejércitos, y a celebrar la fiesta de los tabernáculos” (Zacarías 14:16). Cada año, todas las “familias de la tierra” (v. 17) deberán viajar a Jerusalén a un festival internacional de siete días (Levítico 23:39).

En Apocalipsis 20:4 se nos señala que el gobierno de Jesucristo y sus santos comenzará con mil años. ¿Se imagina usted a las naciones (o delegaciones representantes de las mismas) viajando a una fiesta obligatoria todos esos años? ¿Se los imagina con la expectativa de encontrarse con personas de otros países, que escuchan diferente música, visten ropas distintas y tienen otra cultura? ¿Se imaginan estar juntos, adorando al único Dios verdadero y a todos los habitantes del mundo unidos en una sola religión? Esos viajes serán algo inolvidable, ¡una experiencia extraordinaria que quedará marcada en la vida de cada uno de los participantes!

Una invitación para usted

Tristemente la religión que se llama a sí misma “cristiana” ha sido adulterada y falsificada en muchos aspectos. Las fiestas bíblicas, como la fiesta de Tabernáculos, han sido anuladas y reemplazadas por falsas celebraciones religiosas de origen pagano como la Navidad y la Semana Santa.

Pero Jesucristo prometió que la Iglesia que Él edificó nunca dejaría de existir (Mateo 16:18). Casi 2.000 años después de la fundación de la Iglesia, una “manada pequeña” continúa fiel a las enseñanzas bíblicas. Esa Iglesia sabe mucho de viajes. Año tras año, los miembros preparan sus valijas, toman un medio de transporte y viajan al lugar designado para celebrar la fiesta de los Tabernáculos. Allí viven en lugares temporales (“tabernáculos”) por siete días (Levítico 23:42), en familia y con mucha alegría (Deuteronomio 16:14).

Si Dios le está dando a usted entendimiento acerca de la importancia de obedecer lo que la Biblia realmente dice, usted puede contactarse con nosotros. La Iglesia de Dios, una Asociación Mundial tiene ministros ordenados en muchos países. Ellos están para servirle en todo lo que usted necesite, respecto a este apasionante viaje por la vida, revelado en la Palabra de Dios. Este “viaje de la vida”, cuando es guiado por las instrucciones de Dios, le dará a usted oportunidades extraordinarias de conocer lugares y tener experiencias que marcarán su destino y propósito eternos.