Algunos creen que el apóstol Pablo enseñó que las mujeres debían utilizar sombreros o velos para cubrirse la cabeza cuando van a la iglesia para adorar a Dios. ¿Qué es lo que quiere decir realmente este pasaje?
La idea de que una mujer debe utilizar un sombrero o cierta clase de velo mientras está adorando a Dios se origina en las palabras de Pablo en 1 Corintios 11:5-15. En los comentarios aparecen diferentes puntos de vista acerca de cómo se deben aplicar estas palabras, pero no es necesario investigar acerca de las opiniones de los comentarios, ya que Pablo nos dice exactamente lo que significa si leemos el pasaje en contexto.
Tenga en cuenta el contexto
En los versículos 4 y 5 se nos dice que un hombre no debe orar con su cabeza cubierta, en tanto que una mujer debe cubrírsela cuando ella ora. En el versículo siguiente Pablo escribe acerca de la cabeza de la mujer cuando el cabello se corta, se rapa o está cubierta. Cuando se habla de cortar o de rapar, se está haciendo referencia al largo del pelo: cortar significa dejar el pelo muy corto, en tanto que rapar significa quitarlo por completo, tal como un hombre que afeita la barba de su cara, o cuando una mujer se quita por completo los vellos que cubren sus piernas. Ya que los dos primeros tienen que ver con el largo del cabello, pareciera incongruente que Pablo súbitamente hiciera una tercera descripción que no se refiere a la longitud del cabello.
El largo del cabello, no sombreros ni velos
Esto se confirma unos versículos después en el mismo capítulo. Veamos los versículos 13-15: “Juzgad vosotros mismos: ¿Es propio que la mujer ore a Dios sin cubrirse la cabeza? La naturaleza misma ¿no os enseña que al varón le es deshonroso dejarse crecer el cabello? Por el contrario, a la mujer dejarse crecer el cabello le es honroso; porque en lugar de velo le es dado el cabello”.
El significado de lo que está diciendo Pablo es muy claro—él está hablando de la longitud del cabello, no de un velo, sombrero, o de cualquier cosa que sirva para cubrirse la cabeza.
El punto es que la mujer fue creada por Dios para que luciera como una mujer, y su cabello fue hecho para realzar su belleza de tal forma que su esposo se pudiera gloriar de su femineidad (v. 7). Se supone que un hombre no debe tener características femeninas, incluyendo el pelo largo. Los cristianos deben honrar las diferencias que Dios ha establecido entre ambos sexos.
No es cuestión de justicia
La moda y el estilo y aún la cultura, en algunas ocasiones pueden incluir el uso de un sombrero o velo, y esto es algo que no está prohibido en las Escrituras. Sin embargo, es importante entender que estos accesorios se deben utilizar y tomar como un asunto de moda o cultura, no como un asunto de justicia o de cierto nivel de justicia.