Versiculos Para Meditar

Casa de oración para todos los pueblos

Isaías 56:7   

Yo los llevaré a mi santo monte, y los recrearé en mi casa de oración; sus holocaustos y sus sacrificios serán aceptos sobre mi altar; porque mi casa será llamada casa de oración para todos los pueblos.

En el versículo 6, Dios dice: “a los hijos de los extranjeros” que quieran servir a Dios y guardar el día de reposo. Aunque Dios escogió trabajar con un pueblo específico —las 12 tribus de Israel— durante un tiempo, el plan de Dios siempre ha ido incluir a todas las naciones. Se supone que Israel iba a ser un ejemplo para las naciones a su alrededor, de lo maravillosas que son las leyes de Dios y cuán grande es él. Pero Israel falló en esta misión.

Cuando Jesucristo vino, estaba muy disgustado con la forma en que las personas codiciosas estaban convirtiendo el templo de Dios en una “cueva de ladrones”. Así que echó fuera a los cambistas, y en este contexto, citó a Isaías: “¿No está escrito: Mi casa será llamada casa de oración para todas las naciones? Mas vosotros la habéis hecho cueva de ladrones” (Marcos 11:17).

En sentido figurado, Jesucristo a través de su sacrificio, derribó “la pared intermedia de separación”, una barrera física en el recinto del templo, a la que personas de otras naciones podían ir, y a nivel espiritual quitó el pecado que nos separaba de Dios (Isaías 59:1-2). Esto permitió que los gentiles no continuaran siendo “extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y miembros de la familia de Dios” (Efesios 2:11-14, 19).

Las personas de todas las naciones ahora pueden ser miembros de la Iglesia de Dios, la cual es su templo espiritual y casa de oración para todos los pueblos.

Para más información acerca de la Iglesia, lo invitamos a leer nuestra sección “La Iglesia”.