Corra el juicio como las aguas
Pero corra el juicio como las aguas, y la justicia como impetuoso arroyo.
¿Qué es lo que Dios quiere de su pueblo realmente? El pueblo en los tiempos de Amós celebraba fiestas religiosas y ofrecían sacrificios a Dios y cantaban canciones religiosas (Amós 5:21-23). Pero en lugar de esa hipocresía religiosa que se describe en esos versículos, Dios quiere ver abundancia de verdadera justicia y vidas llevadas con rectitud.
En una sociedad agrícola en medio de un lugar árido en el mundo, el agua y los caudalosos arroyos eran vistos como símbolos poderosos de vida y bendiciones. Dios no sólo quería un goteo intermitente de justicia y una forma correcta de vida, quería un rio que fluyera continuamente.
Para aprender más acerca de la hipocresía comparada con la verdadera justicia, lo invitamos a leer nuestro artículo “El fariseo y el publicano”.