El sábado fue hecho para el hombre por el Señor del sábado
También dijo: El día de reposo fue hecho por causa del hombre, y no el hombre por causa del día de reposo. Por tanto, el Hijo del Hombre es Señor aun del día de reposo.
Como vimos en Ezequiel 20:23-24, Judá fue tomada cautiva por quebrantar las leyes de Dios, incluyendo la profanación del sábado de Dios —tratar algo que es sagrado con irreverencia y desprecio. A través de los siglos después de esa época, los líderes religiosos judíos habían edificado una pared alrededor del sábado en un intento por mantenerse alejados de profanarlo. No obstante, estas reglamentaciones añadidas no eran reglamentaciones de Dios. Al irse al otro extremo, estas reglamentaciones terminaron por ser demasiado restrictivas y no benéficas para la gente.
En Marcos 2:27-28 Jesucristo nos da la perspectiva correcta del sábado. Él creó el sábado para nuestro beneficio. Éste no debe ser una carga, sino una bendición.
Ya que Dios creó todas las cosas por medio de Jesucristo (Efesios 3:9), el que vino a ser Jesucristo fue quien descansó en el séptimo día de la creación (Génesis 2:2-3). Por lo tanto, Él es también el “Señor del sábado” y tiene el derecho de decirnos cómo recordarlo y observarlo.
Para más información del tema, vea nuestro artículo “¿Cómo debería guardar el sábado un cristiano verdadero?”.