Ismael
Además le dijo el ángel del Eterno: He aquí que has concebido, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre Ismael, porque el Eterno ha oído tu aflicción.
Como hemos cubierto previamente, Sarai erróneamente trató de cumplir las promesas de Dios a través de su sierva Agar. Pero Dios no intentó cumplir sus promesas a Abraham a través de la solución de Sarai. El propósito de Dios era proveer a Abraham y Sarai un hijo por medio de un milagro.
Después de que Agar concibió, Sarai la trató duramente (Génesis 16:6). La Biblia muestra que el pacto matrimonial debe ser entre un esposo y una esposa, y que cualquier otra cosa trae resultados negativos.
Debido al maltrato recibido de Sarai, Agar huyó al desierto. El “Ángel del Eterno” la halló ahí y le ordenó regresar a Sarai. Él entonces la alentó diciéndole que su hijo viviría y engendraría una “multitud” de descendientes (v. 10) —formaría “una gran nación” (Génesis 17:20).
Ismael sería un “hombre fiero” y con frecuencia estaría involucrado en conflicto (Génesis 16:12). Los descendientes de Ismael pueden ser identificados como muchos de los pueblos árabes hoy día, y ellos han experimentado una larga historia de conflicto.
Hoy en día, muchos de los descendientes de Ismael están unidos por medio de la religión del Islam. El Salmo 83 describe una confederación árabe unida en contra de Israel. Los descendientes de Ismael probablemente serán parte del “rey del sur” profetizado en Daniel 11:40.
Si usted desea saber más acerca de los descendientes de Ismael en la profecía, lea nuestro artículo titulado “El Rey del sur”.
