Si Dios sabe, ¿por qué orar?
“No os hagáis, pues, semejantes a ellos; porque vuestro Padre sabe de qué cosas tenéis necesidad, antes que vosotros le pidáis”.
Cuando oramos, es importante tener en mente a quién le estamos orando. Nuestro gran Dios Creador sabe todo. Él puede leer nuestros pensamientos. Él sabe exactamente lo que pensamos que necesitamos y sabe exactamente lo que verdaderamente necesitamos. Así que expresarle nuestras necesidades no es cuestión de tratar de hacerle saber algo que no sepa, o ni siquiera recordarle algo. Es cuestión de hacerle saber que nosotros nos damos cuenta que dependemos de Él. Es cuestión de mostrar agradecimiento por lo que nos ha dado y tener una expectativa humilde acerca de lo que nos dará.
La oración es un ejercicio para tratar de aplicar lo que nosotros sabemos de la voluntad de Dios. Si entendemos que Él quiere que nosotros y otros tengamos salud y prosperemos, pero que también quiere que nosotros crezcamos en su carácter y nos preparemos para su Reino, esto formará parte de nuestras oraciones y peticiones.
El hecho de orar por la voluntad de Dios puede ayudarnos a entender mejor su voluntad y su plan eterno. Y la oración le muestra a Dios lo que hay en nuestro corazón. Ésta es la clase de comunicación que construye la relación que Dios desea tener con nosotros.
Para más información acerca de esta relación, vea nuestro artículo “Su relación con Dios”.