Versiculos Para Meditar

Si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos

Mato 19:17-19  

Le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno sino uno: Dios. Mas si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos. Le dijo: ¿Cuáles? Y Jesús dijo: No matarás. No adulterarás. No hurtarás. No dirás falso testimonio. Honra a tu padre y a tu madre; y, amarás a tu prójimo como a ti mismo.

El joven rico le había preguntado a Jesucristo: “Maestro bueno, ¿qué bien haré para tener vida eterna?” (v. 16). Jesús preguntó por qué el joven lo llamó bueno. ¿Estaba él usando el término a la ligera o el joven realmente se dio cuenta que la implicación de llamar a Jesús bueno significaba que Jesús es Dios? Lo más probable es que el joven rico estuviera usando el término a la ligera.

Pero Jesús contestó la pregunta. Como había hecho en el Sermón del Monte (Mateo 5:17-19), Él acentuó otra vez la importancia de obedecer los mandamientos de Dios. Aquí Él identificó cuál grupo de mandamientos Él tenía en mente al nombrar cinco de los Diez Mandamientos así como también el gran mandamiento que resume el amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos (Mateo 22:39-40).

Obviamente, nadie excepto Jesucristo ha guardado la ley de Dios perfectamente. Todos hemos pecado, incluyendo el joven rico, aunque parece ser que él no se daba cuenta de ello. Por su amor a sus riquezas y por no estar dispuesto a dar a los pobres, él identificó su área de debilidad (Mateo 19:21-22).

Ya que todos han pecado, la única forma de ser perdonado y reconciliado con Dios es por medio del arrepentimiento y la aceptación del sacrificio de Jesucristo como pago por nuestros pecados (Romanos 3:23; 5:8-10; Hechos 2:38). Arrepentimiento incluye volverse del pecado y obedecer las leyes de Dios. Obedecer las leyes perfectas y benéficas de Dios es una clave para vivir como Dios quiere que vivamos —el camino que sus hijos vivirán por la eternidad.

Para más información acerca de los mandamientos de Dios, vea nuestro artículo “Los Diez Mandamientos en la actualidad” y descargue nuestro folleto gratuito Los Diez Mandamientos de Dios: todavía importan.