Versiculos Para Meditar

Y que tiembla a mi palabra

Isaías 66:2   

Mi mano hizo todas estas cosas, y así todas estas cosas fueron, dice el Eterno; pero miraré a aquel que es pobre y humilde de espíritu, y que tiembla a mi palabra.

Nuestro Dios creador explica que “el cielo es mi trono, y la tierra estrado de mis pies” (Isaías 66:1), lo que nos muestra que en realidad no necesita un templo construido por seres humanos. Sin embargo, sabemos que Dios le permitió al rey David que reuniera los materiales del templo para que su hijo Salomón lo construyera. A Dios le agradó más la actitud humilde de David de querer darle a Él lo mejor, que el regalo en sí de una construcción.

¡Es una cosa maravillosa que el Dios Todopoderoso esté interesado en tener una relación con aquellos que son modestos, humildes, están arrepentidos y son respetuosos ante Dios y su Biblia!

Para más información acerca de la actitud que Dios desea ver en nosotros, lo invitamos a leer “¿Por qué Dios busca un corazón contrito y humillado” y “El fariseo y el publicano”.