El cumplimiento de los sacrificios del Antiguo Testamento en Cristo

Los sacrificios de Levítico 1-7, están descritos en “Tipos de sacrificios que encontramos en la Biblia y su significado”. Esta tabla muestra como anticipaban el sacrificio de Jesús.

Holocausto

(Levítico 1:3-17; 6:8-13)

Descripción: se quemaba completamente sobre el altar. Olor grato para Dios. Animal sin defectos.

Aspectos que debemos tener en cuenta: debemos dedicarnos a Dios por completo (Mateo 22:36-40; Efesios 5:2).

Cómo se cumple en Cristo: Cristo fue espiritualmente perfecto y estuvo dispuesto a ofrecer su vida por nosotros.

 

Ofrenda de granos

(Levítico 2:1-16; 6:14-23)

Descripción: acompañaba todos los holocaustos. Olor grato para Dios. Harina, aceite, incienso y sal.

Aspectos que debemos tener en cuenta: debemos vivir por cada palabra que sale de la boca de Dios, ser guiados por su Espíritu Santo, orar constantemente y perseverar (Mateo 4:4).

Cómo se cumple en Cristo: Cristo es el pan de la vida.

 

Ofrenda de paz

(Levítico 3:1-17; 7:11-34)

Descripción: olor grato para Dios. Proveía una comida comunal con carne para los sacerdotes y aquellos que daban la ofrenda. Tres tipos: ofrendas de agradecimiento, ofrendas por voto y ofrendas (por voluntad propia) voluntarias.

Aspectos que debemos tener en cuenta: debemos agradecerle a Dios por todas las bendiciones que nos da.

Cómo se cumple en Cristo: Cristo es nuestra ofrenda de paz. Sólo por medio de Él, podemos ser reconciliados con Dios.

 

Ofrenda por el pecado

(Levítico 4:1-35; 6:24-30)

Descripción: generalmente, no eran de olor grato para Dios. sólo se ofrecían las grosuras y la sangre sobre el altar; cuando la ofrenda por el pecado es para toda la congregación, lo demás se quemaba fuera del campamento.

Aspectos que debemos tener en cuenta: todos hemos pecado, la pena del pecado es muerte y el pecado demanda que se derrame sangre (Hebreos 1:3-4; Gálatas 2:20; Romanos 5:8-9).

Cómo se cumple en Cristo: Cristo es nuestra ofrenda por el pecado. Somos pecadores y Él estuvo dispuesto a pagar la pena de muerte por nosotros. Fue crucificado fuera de la ciudad.

 

Ofrenda por la culpa

(Levítico 5:14-6:7; 7:1-7)

Descripción: similar a la ofrenda por el pecado, pero se trata de pecados específicos, especialmente en casos donde la restitución era posible.

Aspectos que debemos tener en cuenta:  debemos arrepentirnos cada vez que pecamos. Las leyes de restitución nos enseñan a hacer lo que sea necesario para reparar el daño que causamos con nuestros pecados.

Cómo se cumple en Cristo: Cristo murió para que cada pecado pudiera ser cubierto y perdonado.

Esta tabla complementa el artículo “Tipos de sacrificios que encontramos en la Biblia y su significado”.

 

Tipo

Descripción

Aspectos que debemos tener en cuenta

Cómo se cumple en Cristo

Holocaustos

(Levítico 1:3-17; 6:8-13)

Se quemaba completamente sobre el altar. Olor grato para Dios. Animal sin defectos.

Debemos dedicarnos a Dios por completo (Mateo 22:36-40; Efesios 5:2).

Cristo fue espiritualmente perfecto y estuvo dispuesto a ofrecer su vida por nosotros.

Ofrendas de granos

(Levítico 2:1-16; 6:14-23)

Acompañaba todos los holocaustos. Olor grato para Dios. Harina, aceite, incienso y sal.

Debemos vivir por cada palabra que sale de la boca de Dios, ser guiados por su Espíritu Santo, orar constantemente y perseverar (Mateo 4:4).

Cristo es el pan de la vida.

Ofrendas de paz

(Levítico 3:1-17; 7:11-34)

Olor grato para Dios. Proveía una comida comunal con carne para los sacerdotes y aquellos que daban la ofrenda. Tres tipos: ofrendas de agradecimiento, ofrendas por voto y ofrendas (por voluntad propia) voluntarias.

Debemos agradecerle a Dios por todas las bendiciones que nos da.

Cristo es nuestra ofrenda de paz. Sólo por medio de Él, podemos ser reconciliados con Dios.

 

Ofrenda por el pecado

(Levítico 4:1-35; 6:24-30)

Generalmente, no eran de olor grato para Dios. sólo se ofrecían las grosuras y la sangre sobre el altar; cuando la ofrenda por el pecado es para toda la congregación, lo demás se quemaba fuera del campamento

Todos hemos pecado, la pena del pecado es muerte y el pecado demanda que se derrame sangre (Hebreos 1:3-4; Gálatas 2:20; Romanos 5:8-9).

 

Cristo es nuestra ofrenda por el pecado. Somos pecadores y Él estuvo dispuesto a pagar la pena de muerte por nosotros. Fue crucificado fuera de la ciudad.

 

Ofrenda por la culpa

(Levítico 5:14-6:7; 7:1-7)

Similar a la ofrenda por el pecado, pero se trata de pecados específicos, especialmente en casos donde la restitución era posible.

Debemos arrepentirnos cada vez que pecamos. Las leyes de restitución nos enseñan a hacer lo que sea necesario para reparar el daño que causamos con nuestros pecados.

Cristo murió para que cada pecado pudiera ser cubierto y perdonado.

 

 

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