En los últimos años el concepto de familia, entre un hombre y una mujer, quienes viven juntos hasta que la muerte los separe, en compañía de los hijos con los que sean bendecidos, ha sufrido ataques adicionales a los que comúnmente había desde décadas anteriores.

Se generaron ideas de conceptos de “familia” muy distintos al diseño original de Dios, de personas confundidas en sus pensamientos donde la mayoría de ellos son víctimas de una sociedad que los ha dañado en muchos sentidos, sin buscar realmente ayudarlos en el fondo real del problema y castigar a los que causan maldad a la niñez y juventud, evitando el ciclo sin fin de corrupción.

Otro de los ataques ha surgido del concepto de “quiero vivir mi vida acompañado temporalmente o solo, de preferencia” porque no se está dispuesto a llevar una vida de pareja con la idea de enfrentar las diferencias juntos, ayudándose a crecer, sino se busca el camino del menor esfuerzo, en el que es primero mi bienestar que el de los demás. La soledad es bien aceptada, mayormente en las grandes ciudades.

Adicional a los dos casos anteriores, quienes deciden tener una pareja permanente, no desean concebir hijos porque los limita en su mayoría a disfrutar los logros de su carrera profesional o tienen miedo de que crezcan en esta sociedad tan problemática.

Y esto es un ataque directo del adversario al plan que diseñó el Creador del universo y del hombre, de tener una gran familia por la eternidad.

Vayamos a conocer un poco de este plan en la creación de la humanidad en el principio de la Biblia, al Génesis en el primer capítulo verso 26 al 28 “Y dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza. Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. Y los bendijo Dios; y les dijo Dios: Fructificad y multiplicaos, llenad la tierra y sojuzgadla, y señoread sobre los peces del mar, y sobre las aves de los cielos y sobre todas las bestias que se mueven sobre la tierra”.

Todo lo que sea posible hacer para desarticular este plan que comenzó desde lo aquí relatado, para Satanás es una contienda ganada, pero ¿Desearía conocer más sobre el plan de salvación de Dios y quién ganará esta batalla? Lea detenidamente el Libro más importante sobre la familia: La Biblia.

Para Vida, Esperanza y Verdad, les habló Ernesto Arteaga.