Versiculos Para Meditar

Bienaventurado aquel cuya transgresión ha sido perdonada

Salmos 32:1-2  

Bienaventurado aquel cuya transgresión ha sido perdonada, y cubierto su pecado. Bienaventurado el hombre a quien el Eterno no culpa de iniquidad, Y en cuyo espíritu no hay engaño.

El Rey David, un hombre según el corazón de Dios, reconoció la gran bendición de ser perdonado. Sin la misericordia de Dios, que es posible gracias al sacrificio de Jesucristo, todos estaríamos destinados al castigo justo por nuestros pecados: la muerte eterna.

Pero nuestro amoroso Dios ha ofrecido la bendición del perdón y borrar nuestros pecados si nos arrepentimos y aceptamos el sacrificio de Cristo. Debemos volvernos completamente a Dios y buscar su ayuda para eliminar el engaño que es inherente a nuestros corazones (Jeremías 17:9-10).

Para más información acerca de estos temas de vital importancia, vea nuestras secciones “Arrepentimiento” y “El perdón”.