Los seres humanos fueron hechos a la imagen de Dios
La Biblia nos dice que Dios creó las criaturas marinas, las aves y los animales de la tierra, cada uno según su género (Génesis 1:21, 24-25). Pero con la humanidad, fue diferente. Los seres humanos fueron creados a la imagen y semejanza de Dios — ¡según el género de Dios!
Los humanos tienen el potencial de llegar a ser hijos de Dios en la familia de Dios por siempre. Como escribió el apóstol Juan: “Mirad, cuál amor nos ha dado el Padre, par que seamos llamados hijos de Dios” (1 Juan 3:1).
Para más información acerca de este increíble potencial, vea nuestros artículos "¿Qué significa haber sido creados a 'imagen de Dios'?" y “El propósito de la vida”.
Para un estudio más profundo de lo que la Biblia enseña acerca de nuestro propósito y destino, descargue nuestro folleto gratuito El propósito de Dios para usted: ¿cuál es la razón de su existencia?