5 formas para ayudar a sus hijos a navegar en el debate de Evolución

Papá! ¿Sabías que antes los caballos no eran más grandes que nuestro perro? ¡Imagínate montando un caballo del tamaño de un perro!”

¿Cómo responde a sus hijos cuando escuchan conceptos evolutivos que les son presentados como si fueran hechos?

No hay forma de escapar al hecho de que nuestros hijos se ven expuestos a las enseñanzas evolutivas —bien sea en las escuelas públicas, programas de naturaleza, libros de ciencia o museos. La teoría de la evolución ha sido adoptada y promovida como si fuera un hecho en virtualmente cada aspecto de la sociedad —en tanto que el Dios Creador ha sido rechazado y minimizado como si fuera un mito religioso.

¿Importa el debate?

Algunos padres que creen en la Biblia tal vez asuman que evolución vs. creación es tan sólo un debate académico para adultos. .Nada pudiera estar más alejado de la verdad! Es críticamente importante que nuestros hijos aprendan que todas las cosas fueron creadas por un Dios real y viviente. Jesucristo es descrito como el Creador que hizo a Adán y Eva con sus propias manos, no por medio de la evolución (1 Timoteo 2:13; Colosenses 1:16).

Es esencial que los padres empiecen a enseñarle a sus hijos acerca de la existencia de Dios desde una edad temprana. No debemos esperar para comenzar a ense.ar esta verdad fundamental a nuestros hijos cuando crezcan más. El dios de este mundo (2 Corintios 4:4, refiriéndose a Satanás el diablo) comienza adoctrinando a nuestros hijos a una edad muy temprana. Debemos ser proactivos para equipar a nuestros hijos de tal forma que puedan vencer este poderoso engaño.

Creer en nuestro Creador es un requisito fundamental para cualquier persona que quiera venir a Él. “Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay” (Hebreos 11:6, énfasis añadido).

Los ángeles en el cielo están constantemente apercibidos de que Dios creó todo —y por eso quieren alabarlo. “Señor, digno eres de recibir la gloria y la honra y el poder; porque t. creaste todas las cosas, y por tu voluntad existen y fueron creadas” (Apocalipsis 4:11). Éste es un excelente ejemplo para nosotros, simples mortales —en todas las .pocas— que debemos seguir.

¿Cómo puede usted preparar a sus hijos para que crean firmemente en el Dios Creador y puedan refutar las falsas enseñanzas de la evolución? Le ofrezco algunas sugerencias:

1. Hable regularmente de Dios

“Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes” (Deuteronomio 6:6-7).

Las falsas enseñanzas llegarán rápidamente a sus hijos de muchas formas. Por lo tanto debemos conversar acerca del verdadero Dios de una forma natural y como parte de nuestra rutina. “Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartar. de él” (Proverbios 22:6).

Por ejemplo, tal vez usted quiera comentar acerca de los animales de su patio —la increíble agilidad que Dios les dio a las ardillas o las capacidades aeronáuticas que les dio a las aves y que sobrepasan las de cualquier avión diseñado por el hombre.

2. Prepárese para enfrentar las enseñanzas básicas de la evolución

¡Usted es el profesor más importante de sus hijos! Por lo tanto, usted debe saber acerca de la evolución y lo que ésta enseña.

Tener algún conocimiento de la teoría de la evolución impedirá que usted la describa de una forma imprecisa —tal como simplificarla diciendo que “los seres humanos vienen de los monos”.

3. Aprenda acerca del “diseño inteligente” con sus hijos

En las últimas dos décadas, los microbiólogos han hecho impresionantes descubrimientos acerca de la célula viviente. Cada descubrimiento se añade a la montaña creciente de evidencia de que esta increíble complejidad que desafía a la mente sólo puede venir de una mente súper inteligente, capaz de la ingeniería más compleja.

Es críticamente importante que nuestros hijos aprendan que todas las cosas fueron creadas por un Dios real y viviente. El movimiento del diseño inteligente está dejando a los evolucionistas cada vez con menos argumentos. La mayoría de los autores del “diseño inteligente” escogieron enfocar este tema desde un punto de vista exclusivamente analítico, esto es, mostrando que la evolución claramente falla al explicar el origen y la complejidad de la vida y que es absolutamente necesario que esté involucrada una súper inteligencia. La mayoría no está tratando de involucrar al Dios de la Biblia en el cuadro.

Por ejemplo, usted puede ilustrar el principio de “la complejidad irreductible” a sus hijos, tomando una trampa para ratones o ensamblando una bicicleta, explicando cómo cada parte debe tener una forma específica y estar en un lugar preciso para que todo el sistema

pueda operar y funcionar adecuadamente.

Las animaciones de video de las células vivientes también pueden ser excelentes herramientas de enseñanza. Éstas muestran la increíble complejidad de los miles de millones de partes que funcionan armoniosamente en cada célula viva. Cuando usted ve la increíble complejidad requerida para darnos vida, usted (y sus hijos) sólo podrán sentir un profundo respeto y reverencia por el gran Dios Creador.

4. Afronte rápidamente las enseñanzas evolutivas

Ya que usted es el que tiene la responsabilidad primaria de educar a sus hijos, necesita saber lo que otros les están enseñando. Comience el hábito de discutir lo que les ense.an diariamente en la escuela, como algo rutinario.

Cada vez que su hijo se encuentre con conceptos evolutivos —bien sea en la escuela o en un programa de televisión o en un libro— discútalo tan pronto como le sea posible. Si usted está preparado con algunos hechos que demuestran el error de la evolución, usted puede ayudar a que sus hijos procesen lo que han escuchado a un nivel que ellos puedan manejar mejor.

Es bueno recordar que si la evolución hubiera ocurrido, muchos eslabones perdidos ya se hubieran encontrado. En lugar de ello, lo que vemos son muchas brechas en los registros de fósiles en los que la evolución darviniana predijo que habría creaturas de transición. Vea nuestro artículo de Vida Esperanza y Verdad: El registro fósil y la creación.

Cuando se trate de las enseñanzas evolutivas en la escuela, tenga en cuenta estos puntos:

• Si sus hijos se preocupan porque van a responder cosas que no creen cuando les hagan un examen, tenemos esta sugerencia. Cuando las “respuestas correctas” sean conceptos evolutivos, su hijo sencillamente puede añadir al principio de la página del examen, frases como: “Según el libro” o “Según la teoría de la evolución”.
• Advierta a sus hijos que no comiencen debates en el salón de clases. Argumentar con profesores que no creen en el relato bíblico de la creación sólo causar. un conflicto innecesario o rechazo de sus hijos a largo plazo. A ningún profesor le gusta ser blanco de críticas o ser confrontado en frente de la clase.
• Prepare a sus hijos para estar “siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande razón” (1 Pedro 3:15). Éste es un principio que todos debemos practicar. Esto requiere que estemos preparados adecuadamente con el conocimiento de la verdad. Recuerde a sus hijos que no están solos; que hay muchos otros que creen en el Dios Creador en lugar de la evolución. Todos podemos y debemos tener confianza al saber que los hechos son sólidos, verdaderos e irrefutables.

5. Entrene a sus hijos para que hagan una lista de sus pruebas personales de la existencia de Dios

Sus hijos pueden hacer una lista a la que pueden agregar o hacer modificaciones a medida que crezcan en entendimiento. Sería por supuesto una buena idea que usted tuviera primero su lista personal.

Creo que los artículos en la sección de Vidaesperanzayverdad.org, acerca de “¿Existe Dios?”, pueden ayudarle en la responsabilidad de equipar a sus hijos para que puedan afrontar las enseñanzas evolutivas y desarrollar una relación creciente con nuestro Creador. Lo invitamos a que señale este sitio y lo visite con frecuencia.

Padres, Dios les ha dado a ustedes la responsabilidad de equipar a sus hijos con el conocimiento que les ayude a construir una relación sólida con su Creador.