Millones de cristianos alrededor del mundo sólo asisten a la iglesia en los días de Navidad y Semana Santa.
Según el Hartford Institute for Religion Research [Instituto Hartford para la investigación acerca de las religiones], sólo 20 por ciento de los cristianos estadounidenses va a la iglesia cada semana (y el número es aún menor en Europa). Pero muchas iglesias informan que su asistencia casi se duplica durante Navidad y, cada año, a fines de diciembre, hay un importante aumento de búsquedas en Google de la palabra “iglesia”.
¿Por qué las personas que normalmente no van a la iglesia lo hacen en Navidad?
Sólo cada uno puede responder a esta pregunta, pero lo más probable es que muchos vean ese día como una celebración especial del nacimiento de Cristo y quieran hacer lo que ellos creen que lo honra.
Pero piense por un momento en la siguiente pregunta: ¿es la Navidad igualmente importante para Jesús mismo?
En la Biblia no se menciona
Para responder cualquier pregunta acerca de Jesús, nuestra primera (y en realidad única) fuente lógica es la Biblia, especialmente los cuatro Evangelios y demás escritos de los contemporáneos de Cristo. Cuando estudiamos estos documentos, es notorio que la celebración más popular del cristianismo en la actualidad está completamente ausente. Nadie —ni Cristo, ni Pedro, ni Juan ni Pablo— da ninguna señal de haber celebrado el nacimiento de Jesús en diciembre (ni en ningún otro mes).
Esto no significa que la Biblia no mencione para nada acerca de su nacimiento, pero la verdad es que da muy pocos detalles al respecto. Sólo los Evangelios de Mateo y Lucas incluyen el relato (Marcos y Juan no) y, de hecho, sólo unas pocas referencias de Mateo 1-2 y Lucas 2 hablan específicamente del día en que Jesús nació (Mateo 1:25; Lucas 2:7-16). El resto de estos capítulos describe más bien los eventos que sucedieron alrededor de su nacimiento, pero no todo lo que ocurrió en el mismo día.
La “historia de Navidad” comúnmente conocida, reúne erróneamente casi todos los eventos de Mateo 2 y Lucas 2 en un solo día a fines de diciembre.
Por ejemplo, la mayoría cree que tres magos visitaron al bebé Jesús la misma noche en que nació. La realidad es que los magos no llegaron sino hasta mucho después, cuando la familia ya vivía en una casa y Cristo no era un recién nacido (Mateo 2:11). Además, la Biblia ni siquiera dice que los magos hayan sido tres (v. 1). Para descubrir más acerca de los mitos del nacimiento de Jesús, lea nuestro artículo: “El nacimiento de Cristo: mitos y falsas creencias”.
¿Qué celebró Jesucristo?
Si Cristo no celebró las fiestas religiosas más populares de nuestra época, ¿celebró alguna otra? La respuesta es sí. De hecho, el Nuevo Testamento nos da muchos detalles acerca de los días religiosos que Jesús guardó.
A lo largo de su vida, Cristo observó fielmente el séptimo día de la semana como día de reposo. Era una parte tan habitual de su vida que Lucas incluso lo describe como “su costumbre” (Lucas 4:16). No importa dónde estuviera, desde Jerusalén hasta Galilea, Cristo siempre descansaba e iba a la sinagoga el sábado para escuchar, leer y a veces enseñar las Escrituras (vv. 17-21).
Además, Jesús se crió en una familia que observaba fielmente las fiestas bíblicas del Antiguo Testamento (Levítico 23). Lucas, por ejemplo, dice que su familia iba “todos los años a Jerusalén en la fiesta de la pascua” (Lucas 2:41). Todos los años. Y no sólo iban a guardar la Pascua; también celebraban los dos días santos que caen dentro de la semana siguiente: el primero y el séptimo día de la Fiesta de Panes Sin Levadura (Lucas 2:43; vea también Levítico 23:4-8).
De la misma manera, Jesús guardaba todas las otras fiestas de Levítico 23. Prueba de esto es el relato de Juan 7, donde Cristo guarda su última Fiesta de Tabernáculos como ser humano.
Luego de la muerte de Jesús, la Iglesia del primer siglo siguió su ejemplo observando los mismos días bíblicos especiales. Puede encontrar varias escrituras que lo comprueban en nuestro artículo de VidaEsperanzayVerdad.org “Las festividades cristianas”.
Seguir a Cristo
Uno de los principales objetivos de Discernir es ayudar a nuestros lectores a descubrir verdades bíblicas que la mayoría no entiende ni practica. Es por eso que escribimos tan a menudo acerca de las fiestas bíblicas. Estos fueron días establecidos por Dios y fueron celebraciones muy importantes para Jesucristo durante su vida en la Tierra. Sin embargo, la mayoría de los cristianos modernos ignora las fiestas establecidas en la Biblia y en su lugar celebra días antibíblicos como la Navidad —fiestas que fueron creadas por el hombre a partir de cultos paganos. ¿No le parece extraño que la Navidad no se mencione por primera vez sino hasta el año 336 d.C. —más de 300 años después de la muerte de Cristo?
Algunos piensan que no hay nada de malo en celebrar días originalmente basados en el paganismo porque, después de todo, han sido cristianizados. Pero ¿qué dice Dios al respecto? La verdad es que Él nunca ha dado permiso para que adoptemos costumbres paganas y las redefinamos como adoración cristiana. De hecho, Dios ordenó muy claramente que jamás debemos hacer tal cosa (Deuteronomio 12:29-31; Jeremías 10:1-5; 2 Corintios 6:17).
Una de las frases más concisas y memorables del apóstol Pablo se encuentra en 1 Corintios 11:1: “Sed imitadores de mí, así como yo de Cristo”. En ella, Pablo captura la esencia de lo que realmente es el cristianismo.
Cuando se trata de adorar a Dios, ¿imitará el ejemplo de Cristo observando las fiestas bíblicas que Él guardó? O, ¿celebrará las fiestas inventadas por el hombre?
Si desea profundizar acerca de los problemas con la Navidad, lea nuestro artículo “Jesucristo vs. Navidad” en la edición de Discernir, noviembre/diciembre 2014”.
¿Es la Navidad una celebración cristiana? Cuatro preguntas para reflexionar
La mayoría de las personas asume que la Navidad es una fiesta cristiana, aunque se ha secularizado ampliamente y hoy es celebrada por millones de no cristianos. Éstas son cuatro preguntas acerca de la Navidad que vale la pena analizar. Las respuestas podrían llevarlo a reconsiderar si realmente se trata de una fiesta “cristiana”:
- ¿Es cristiano celebrar el nacimiento de Jesús en el cumpleaños de un antiguo dios sol?
- ¿Es cristiano mantener vigentes antiguas costumbres de adoración paganas llamándolas “cristianas”?
- ¿Es cristiano mentirles a los niños acerca de la existencia de un ser mítico?
- ¿Es cristiano ignorar las fiestas ordenadas por la Biblia y en su lugar celebrar días que no aparecen en las Escrituras?