por Mike Bennett

En la publicación acerca de Juan 14:1, hablamos acerca de que el punto de partida esencial del verdadero cristianismo es creer en Dios sin ninguna duda. En 1 Tesalonicenses 5:21, el apóstol Pablo nos muestra hasta qué punto esa creencia en Dios se refleja en todos los aspectos de nuestra vida. El estilo de vida que Dios nos ha revelado por intermedio de la Biblia debe ser el filtro a través del cual “probamos”, o examinamos, todas las ideas, creencias y actividades.

He aquí tres claves para cumplir esa escritura:

• Una persona que afirma que representa y enseña las cosas de Dios debe ser probada con la Biblia —la Palabra de Dios. Lo primero que se debería entrar a analizar es si la persona que está enseñando, enseña y guarda la ley de Dios o no (Isaías 8:20). Jesucristo también nos exhorta a estar atentos a los falsos maestros religiosos (Mateo 7:15-16, ver también 1 Juan 4:1).
• Para cumplir con: “examinadlo todo” debemos tener la misma actitud que tuvieron los bereanos, que comprobaron todas las cosas por medio del estudio de la Palabra de Dios (Hechos 17:11).
• Cualquier idea o actividad que se nos presente en la vida, debe ser escudriñada por intermedio del filtro de la verdad de Dios. Madurar como cristianos significa tener la capacidad de discernir entre “el bien y el mal” (Hebreos 5:14) y lo que es y no es aceptable delante de Dios (Efesios 5:10).

Una vez que hemos determinado la verdad, ¡debemos mantenernos firmes a ésta, y eso significa que debemos ser “firmes” y “constantes” (1 Corintios 15:58) en nuestra creencia en Dios y su verdad!

Si usted desea aprender más acerca de lo que debe encontrar y a lo que se debe aferrar, lo invitamos a leer “¿Qué es la verdad?”.