¿Viven por siempre las almas de los muertos?
He aquí que todas las almas son mías; como el alma del padre, así el alma del hijo es mía; el alma que pecare, ésa morirá.
La palabra traducida alma es la palabra hebrea nephesh, la cual puede referirse aun a los animales (Génesis 1:21) y cadáveres (Levítico 22:4). La Biblia no describe a los seres humanos como seres con un alma inmortal, sino seres que son un alma viviente —una criatura viviente. Como dice Dios en Ezequiel 18:4 y 20, las almas humanas pueden morir. De hecho, la muerte —muerte eterna— es el castigo por el pecado (Romanos 6:23).
Únicamente Dios tiene inmortalidad (1 Timoteo 6:16), y Él la ofrece como un regalo a los que creen y obedecen a Jesucristo (Juan 3:16; Romanos 6:23).
Para un estudio de los temas de la mortalidad del alma y el infierno, vea nuestro artículos “Alma inmortal: ¿qué es el alma?” y “¿Qué es el infierno?” Entender lo que la Biblia enseña acerca de la mortalidad del alma provee más argumentos para que los cristianos no celebren el Día de Todos los Santos y Halloween.