Generalmente estamos demasiado ocupados corriendo, de tal forma que no tenemos tiempo para pensar realmente en el significado de la vida. Pero alguna veces no podemos menos que preguntarnos, ¿qué sentido tiene todo esto? ¿Por qué estamos aquí?
Vivimos corriendo una maratón—corremos sin descanso en un caminador eléctrico sin fin, trabajando, pagando cuentas, corriendo de acá para allá con el fin de poder cumplir con las obligaciones y responsabilidades sociales, para finalmente quedar exhaustos, y levantarnos al otro día para volver a hacerlo.
Típicamente, nos escurrimos cada día, cada mes, cada año, viviendo como si la vida no tuviera fin. Ocasionalmente, sin embargo, disminuimos un poco el ritmo de nuestra imperativa cruzada en busca del “éxito”—en busca de dinero, amor, fama, poder… lo que sea—y nos hacemos una de las preguntas más profundas de la vida: ¿por qué estoy aquí? ¿Es la vida algo más que “adquirir bienes” o “hacer cosas”? ¿Cuál es el significado de la vida? ¿Existe una razón o propósito para esta existencia?
Seguramente habrá un significado más profundo de la vida, distinto del de “correr como locos”, en un esfuerzo desesperado por conseguir o alcanzar algo antes de que esto se termine. ¡Y sí lo hay! El Dios que nos creo a nosotros lo hizo con un propósito increíble, con una intención que pocas personas comprenden en verdad. Entender su propósito para esta existencia, llenará el vacío de “la carrera de locos” a nuestro alrededor y le dará a su existencia un significado increíblemente rico y digno.
Explore y descubra con nosotros lo que Dios nos revela acerca de porqué Él creó la vida. Aquel que lo hizo a usted desea que usted enfoque su mente y su vida en el más increíble entendimiento posible—¡su propósito, su razón de ser!
