Nuestro mundo está lleno de estafas, fraudes y engaños en casi todas las formas imaginables. También está lleno de desinformación espiritual. ¿Qué podemos hacer?
Hace diez años, en enero del 2014, esta revista hizo su debut. Fue llamada Discernir porque nuestra intención es ayudar a los lectores a descubrir las respuestas de las mayores preguntas de la humanidad, identificando y aplicando las verdades espirituales eternas establecidas por nuestro Creador.
Dado que nuestro sitio web (vidaesperanzayverdad.org), existía desde antes, también contemplamos la idea de titular la revista Vida, Esperanza y Verdad. Pero luego de meditarlo, preferimos Discernir; ya que nuestra meta es ayudar a la gente a discernir los valores eternos de Dios en todos los aspectos de la vida.
Y una década después, seguimos comprometidos con nuestros principios.
En la edición inaugural de su columna “Analice esto”, Clyde Kilough, nuestro editor, escribió: “Dejemos las cosas claras desde el principio —el propósito real de esta revista, Discernir, es influenciar su forma de pensar… de la misma forma en que todos los demás están tratando de hacerlo…
“No nos jactamos de tener un espacio especial en el mercado del conocimiento. Pero sabemos que los problemas de la humanidad son de naturaleza espiritual —surgen de una forma de pensar equivocada y de actitudes destructivas. De ahí que deban ser confrontados con soluciones espirituales —cambios en la percepción, el entendimiento y la actitud”.
Beneficios del discernimiento
¿Por qué estamos tan comprometidos con ayudarle a discernir la verdad espiritual acerca de lo que es moral e inmoral, y lo que es bueno y malo? Porque, como dijo Pablo: “la piedad para todo aprovecha, pues tiene promesa de esta vida presente, y de la venidera” (1 Timoteo 4:8).
Discernir y vivir según la guía de Dios tiene beneficios en esta vida y en la próxima.
Como se profetizó en la Palabra de Dios, el mundo ha progresado mucho en el ámbito de la tecnología (Daniel 12:4). Pero, como también lo dicen las profecías bíblicas, los humanos aún no logran vivir en paz unos con otros (Isaías 59:8).
Diez años después del comienzo de esta revista, analicemos las condiciones actuales.
Necesidad urgente de discernimiento
En nuestro mundo moderno, aprender a detectar y protegernos de estafas por internet es una habilidad vital. Con tantas personas inmorales que continuamente intentan engañar a los más vulnerables, saber cómo evitar que los ladrones digitales accedan a nuestra información personal es esencial para quienes están aprendiendo a navegar en nuestra sociedad digital.
En el pasado, la habilidad de leer a la gente y evitar ser engañados se conocía como “tener sabiduría de calle”. Esta clase de discernimiento puede aprenderse a través de la experiencia, la observación y el conocimiento adquirido. Pero existe una clase aún más importante de discernimiento.
Cuando Jesús vino a la Tierra, hizo una distinción entre la habilidad de discernir el clima y una forma de discernimiento más profunda. En cierta ocasión, los fariseos y saduceos lo enfrentaron demandando una señal milagrosa y Jesús respondió: “Al atardecer dicen: ‘Hará buen tiempo, porque el cielo está enrojecido’; y al amanecer dicen: ‘Hoy habrá tempestad, porque el cielo está enrojecido y sombrío’. Saben discernir el aspecto del cielo, pero no pueden discernir las señales de los tiempos” (Mateo 16:2-3, Reina Valera Actualizada 2015; énfasis añadido).
Jesús les estaba diciendo a estos líderes religiosos que les faltaba discernimiento. Si hubieran sido capaces de discernir las profecías bíblicas acerca de Cristo, no hubieran necesitado que Él hiciera un milagro para probar su identidad.
Es importante notar que estos eran líderes religiosos muy educados, con conocimiento de las profecías de la Biblia. Pero no tenían discernimiento espiritual —la habilidad para aplicar ese conocimiento en su contexto.
Ahora veamos por qué puede faltarnos discernimiento y cómo podemos obtener esta habilidad crucial.
La carencia natural de discernimiento espiritual
Hoy en día las personas asumen que si tan sólo buscan dentro de sí mismas pueden encontrar las respuestas a las mayores interrogantes de la vida. Muchos creen que pueden encontrar por sí mismos los valores morales correctos para ellos. “Sólo confía en tu corazón”, dicen. “Decide según lo que se siente bien para ti”.
Lamentablemente, la mayoría ignora que este tipo de pensamiento es el engaño más antiguo del que ha sido víctima la humanidad. De hecho, Adán y Eva, los primeros humanos, cometieron ese trágico error en el jardín de Edén.
Satanás, el adversario de Dios y los humanos, se presentó ante Eva en forma de serpiente. Usando tácticas engañosas, llamó a Dios mentiroso por decir que los humanos morirían si comían del fruto prohibido y convenció a Eva de que podía decidir por sí misma lo que era bueno y malo (Génesis 3:1-5).
Lamentablemente, Eva fue engañada. Creyó las mentiras de Satanás y pensó que podría tomar la decisión por sí misma.
“Adán no fue engañado, sino la mujer, al ser engañada, incurrió en transgresión” (1 Timoteo 2:14). Si bien este pasaje indica que Adán no fue engañado por Satanás en esa instancia, él decidió insensatamente seguir el ejemplo de su esposa y también comió del fruto prohibido. Así, su propia mentalidad equivocada lo hizo caer.
Tanto Adán como Eva carecían del discernimiento espiritual necesario para tomar la decisión correcta. Como resultado de su pecado, fueron expulsados del jardín y, lo que es más importante, perdieron el acceso al árbol de la vida. Ese árbol simbolizaba su oportunidad de tener vida eterna (Génesis 3:23-24).
Los límites del razonamiento humano
Los seres humanos —creados a imagen de Dios (Génesis 1:27)— fuimos dotados con habilidades increíbles para pensar y razonar. Y puede ser muy atractivo pensar que podemos determinar nuestros valores morales por nosotros mismos y resolver todos nuestros problemas sin la ayuda de Dios.
Pero la realidad es que no fuimos creados con discernimiento espiritual inherente.
Como dijo el profeta Jeremías: “Conozco, oh [Eterno], que el hombre no es señor de su camino, ni del hombre que camina es el ordenar sus pasos” (Jeremías 10:23). Y acerca de nuestro corazón, el mismo profeta dijo: “Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?” (Jeremías 17:9).
Por profunda que sea nuestra introspección, no podemos encontrar respuestas espirituales en nuestro interior sin la ayuda de Dios. Como resultado, “todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios” (Romanos 3:23).
El engaño continuo de Satanás
Aunque en la actualidad Satanás no les habla a las personas como lo hizo con Eva, su labor de confundir y engañar a los humanos sigue presente. Y lamentablemente, sigue teniendo éxito.
Apocalipsis 12:9 explica que este ser malvado “engaña al mundo entero”. Esto se confirma en 1 Juan 5:19, donde leemos que “el mundo entero está bajo el maligno”.
El apóstol Pablo admitió: “el pecado… me engañó” (Romanos 7:11). Hebreos nos advierte acerca de “el engaño del pecado” (Hebreos 3:13). Así como Satanás hizo que el pecado fuera atractivo para Eva, hace que el pecado sea atractivo para la humanidad hoy.
Todos nosotros compartimos la debilidad de Adán, Eva, Pablo y el resto de los seres humanos: somos víctimas del engaño de Satanás y de nuestro pensamiento equivocado.
El regalo del discernimiento espiritual
Cuando Dios nos llama, abre nuestras mentes a la realidad de nuestro propio engaño. Además, si nos arrepentimos de nuestros pecados y nos comprometemos con Él por medio del bautismo, podemos recibir el Espíritu Santo (Hechos 2:38).
El Espíritu de Dios se describe como un espíritu “de poder, de amor y de dominio propio” (2 Timoteo 1:7). Y una mente guiada por ese espíritu es capaz de discernir entre lo que es verdadero y lo que no. Por eso el apóstol Juan se refirió al Espíritu Santo como “el Espíritu de verdad” (Juan 14:17; 15:26). Y especialmente importante, dijo que “el Espíritu de verdad… os guiará a toda la verdad” (Juan 16:13).
Pablo comparó nuestro estado natural con tener un velo en la mente que obstruye nuestro entendimiento de las cosas espirituales. Sin embargo, también dijo que “el mismo velo no descubierto… por Cristo… cuando se conviertan al Señor, el velo se quitará” (2 Corintios 3:14, 16).
Buscar y mantener el discernimiento espiritual
El discernimiento espiritual es un regalo de Dios que debemos buscar y utilizar constantemente. Proverbios 2:3 nos anima a “[clamar] a la inteligencia,” y Hebreos 5:14 dice que los cristianos maduros ejercitan sus sentidos “en el discernimiento del bien y del mal” (énfasis añadido).
Pablo también les dijo a los creyentes filipenses que oraran para que “su amor abunde aún más y más en conocimiento y en todo discernimiento” (Filipenses 1:9, Reina Valera Actualizada 2015; énfasis añadido).
La necesidad de discernimiento espiritual en el futuro
Jesús hizo énfasis en la crucial necesidad de discernimiento espiritual a medida que nos acercamos al fin de esta era, justo antes de su regreso.
Una forma especialmente importante de determinar si un profeta es genuino o es un impostor es evaluar si su mensaje concuerda con las enseñanzas de la Biblia.
En su sermón del monte de los Olivos, hablando acerca de las condiciones del tiempo del fin, Cristo dijo: “Mirad que nadie os engañe. Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y a muchos engañarán” (Mateo 24:4-5, énfasis añadido).
Cuando los eventos del fin del mundo comiencen, a un ser humano —llamado hombre de pecado, el inicuo y el falso profeta— le será dada la habilidad de hacer grandes milagros. Se le darán estos poderes sobrenaturales para que engañe a las personas (Apocalipsis 19:20).
Al describir los poderes engañosos de este hombre, Pablo escribió: “inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos, y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos” (2 Tesalonicenses 2:9-10).
Jesús también advirtió acerca de estos milagros engañosos, diciendo: “se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos” (Mateo 24:24).
¿Por qué los escogidos (los elegidos de Dios a quienes Él considera especiales) podrían ser vulnerables a este engaño? La respuesta está en la naturaleza sobrenatural de los milagros del falso profeta, que sugieren la presencia de un poder invisible.
Cómo aumentar su discernimiento espiritual
Ante la certeza de estos futuros milagros engañosos, ¿cómo podrán los escogidos discernir que las señales del falso profeta no provienen de Dios y que no deben seguirlo?
El pueblo de Dios tendrá discernimiento espiritual y conocerá bien la Palabra de Dios. Entenderán que Satanás y sus demonios también pueden hacer milagros sobrenaturales y recordarán la advertencia de Dios a los antiguos israelitas: si un profeta hacía una señal o maravilla, pero adoraba a otros dioses, no debían escucharlo (Deuteronomio 13:1-3).
Además, el pueblo de Dios que tendrá discernimiento espiritual en el tiempo del fin, seguirá el consejo de Juan: “no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo” (1 Juan 4:1).
Una forma especialmente importante de determinar si un profeta es genuino o es un impostor es evaluar si su mensaje concuerda con las enseñanzas de la Biblia. Si desea estudiar más maneras de discernir entre un falso profeta y uno verdadero, lo invitamos a consultar nuestro artículo “Profetas falsos”.
Consejos para mejorar su discernimiento espiritual
Éstas son algunas recomendaciones para fomentar el desarrollo de su discernimiento espiritual:
- Buscar regularmente la ayuda y sabiduría de Dios a través de la oración (Proverbios 2:3).
- Vivir de acuerdo con lo que aprende de la Biblia (Salmos 111:10). Nuestro folleto ¡Cambie su vida! es un recurso valioso para comenzar.
- Hacer nuestro Curso bíblico con el fin de obtener un entendimiento amplio de las instrucciones de Dios.
- Continuar leyendo la revista Discernir para aprender más acerca de las expectativas que Dios tiene de nosotros.
- Si tiene preguntas, no dude en ponerse en contacto con nosotros con el fin de recibir respuestas basadas en la Biblia.
Deseamos sinceramente que cada uno de nuestros queridos lectores crezca en discernimiento espiritual y sea contado entre los escogidos cuando Cristo regrese.
