¿Es la guerra nuclear inevitable?

¿Usará Rusia bombas nucleares? ¿Qué hay de otras naciones que cuentan o que están prontas a contar con este tipo de bombas? ¿Qué dice la Biblia acerca de un eventual apocalipsis nuclear?

La última vez que se utilizaron bombas nucleares fue en 1945. A partir de ese momento, amenazas acerca de un posible apocalipsis nuclear, iniciado por accidente o de manera intencionada, han escalado y disminuido a lo largo de los años.

Pero los conflictos recientes, el debilitamiento percibido del paraguas nuclear estadounidense para proteger a sus aliados menos poderosos y la proliferación de líderes dispuestos a presionar el botón nuclear a la más mínima provocación, ¿hacen de una guerra nuclear más probable que nunca? ¿Es algo inevitable?

¿Es posible que las armas nucleares tácticas hagan realidad lo que hasta ahora era impensable?

Y una vez que el "genio nuclear" haya salido de su botella, ¿qué impedirá que los acontecimientos entren en una espiral que desemboque en una guerra de escala mundial, destrucción mutua asegurada y un invierno nuclear? ¿Qué puede evitar la extinción humana?

¿Usará Rusia armas nucleares en Ucrania?

Los sueños de resetear el reloj nuclear manifestados después de la guerra fría, se han visto constantemente truncados por los conflictos emergentes entre las distintas superpotencias. Parece improbable que Rusia y Estados Unidos revivan los tratados de control de armamento nuclear firmados en el pasado. Por el contrario, la invasión de Rusia a Ucrania ha desencadenado nuevas amenazas nucleares.

“El ex-presidente ruso Dmitry Medvedev, aliado del actual mandatario del Kremlin, Vladimir Putin, advirtió a la Organización del Tratado Atlántico Norte (OTAN) de que la derrota de Rusia en Ucrania podría desencadenar una guerra nuclear”.

“La derrota de una potencia nuclear en una guerra convencional puede desencadenar una guerra nuclear”, advirtió Medvedev en un mensaje de Telegram, quien actualmente ocupa el cargo de vicepresidente del consejo de seguridad de Putin.

“Las potencias nucleares jamás han perdido en conflictos importantes de los que dependa su destino”, dijo Medvedev, quien fue presidente de Rusia entre 2008 y 2012 (“Medvedev, aliado de Putin advierte a la OTAN acerca de una guerra nuclear si Rusia es derrotado en Ucrania”, Euronews, 19 de enero de 2023).

Si bien es poco probable que Rusia utilice sus armas nucleares de largo alcance en Ucrania, ¿qué hay de las llamadas armas nucleares tácticas?

Kristin Ven Bruusgaard, directora de la Escuela Noruega de Inteligencia, escribió en la revista estadounidense Foreign Affairs:

“Si Rusia se propusiera utilizar armas nucleares en Ucrania, lo más probable es que recurriría a su arsenal sub-estratégico o táctico. Éste se trata de armas nucleares montadas en plataformas aéreas, marítimas o terrestres, que generalmente deben recorrer menores distancias que su arsenal estratégico. Sus ojivas suelen tener un impacto menor, con una potencia que oscila entre uno y varios cientos de kilotones (como referencia, la bomba lanzada sobre Hiroshima tenía una potencia de unos 15 kilotones). En otras palabras, estas armas pueden causar daños limitados o significativos, dependiendo del objetivo, y tienen el potencial de arrasar con una ciudad…”.

Albert Einstein dijo: “Definitivamente, no soy de la opinión de que el peligro de guerra pueda eliminarse sin un gobierno mundial. Sin tal medida de fuerza, la carrera armamentista, y en última instancia, una guerra de proporciones mundiales es inevitable”.“El momento más peligroso de la guerra será cuando Ucrania esté en la cúspide de la victoria y Putin sienta que la única alternativa para retomar el control, sea una escalada sin precedentes. Sin embargo, otro momento peligroso podría llegar si los líderes militares o políticos rusos deciden que una confrontación militar directa con la OTAN es inevitable” (“Cómo Rusia podría decidir utilizar sus armas nucleares”, 6 de febrero del 2023).

La estrategia de disuasión utilizada en la Guerra Fría para evitar una escalada nuclear se conocía como la “destrucción mutua asegurada” (MAD, por sus siglas en inglés), la cual funcionaba bajo el supuesto de que nadie estaría lo suficientemente loco como para iniciar una guerra que destruiría a ambos lados del conflicto… y probablemente al mundo entero.

En su artículo “¿La guerra nuclear es inevitable?”, el profesor de Harvard y ex-subsecretario de defensa de los Estados Unidos Joseph S. Nye Jr., escribió:

“La disuasión nuclear se basa en una paradoja de utilidad. Si las armas son totalmente inutilizables, no disuaden. Pero si son demasiado utilizables, la amenaza de una guerra nuclear, con toda su devastación, siempre estará presente” (5 de septiembre de 2022).

Con las armas nucleares tácticas de por medio y con cada vez más naciones y grupos de naciones que buscan un estatus nuclear, ¿las estrategias de disuasión tienen algún sentido hoy en día?

China y la ampliación de su armamento nuclear

La agencia de noticias estadounidense Associated Press News reportó: “China está ampliando su armamento nuclear y está en proceso de cuadruplicar el número de ojivas nucleares que tiene actualmente, meta que desea alcanzar para el año 2035, reduciendo así, rápidamente, su distancia con Estados Unidos” (“El Pentágono advierte que China planea incrementar a 1500 el número de sus ojivas nucleares”, 29 de Noviembre de 2022).

La rápida acumulación de armamento convencional y nuclear por parte de China está preparando el escenario para un aumento de las tensiones entre las dos mayores potencias económicas del mundo.

En este caso, todos los ojos están puestos en Taiwán. En 2022, China envió 1.727 aviones de combate que atravesaron la zona área de Taiwán. Estas incursiones provocativas convierten a la isla en un punto de alta tensión en el oriente.  

A principios de 2023, la revista de noticias Time, reportó que el general estadounidense Mike Minihan advirtió a sus tropas de que espera una guerra próxima con China: “Mi instinto me dice que lucharemos en el 2025…”.

“Espero estar equivocado”, escribió Minihan en un mensaje interno, que circuló por las redes sociales, dirigido a su jefatura. “El presidente chino Xi Jinping”, continúa diciendo, “aseguró su tercer mandato y creó un consejo de guerra en octubre del 2022. Las elecciones presidenciales en Taiwán son en 2024 y ofrecerán a Xi una razón para atacar. Las elecciones presidenciales en Estados Unidos también son en 2024 y ofrecerán a Xi un Estados Unidos distraído. El equipo de Xi, la razón y la oportunidad están todas alineadas para el 2025” (“La predicción de un general estadounidense acerca de un conflicto armado con China en 2025 pone en riesgo que nuestros peores miedos se vuelvan realidad”, 31 de enero de 2023).

Otros países con armamento nuclear

Por supuesto, Ucrania y Taiwán no son los únicos puntos álgidos en donde se podría desencadenar una guerra nuclear.

De acuerdo con The Union of Concerned Scientists: “Nueve países poseen armamento nuclear. Estos son: Estados Unidos, Rusia, Francia, China, Reino Unido, Pakistán, India, Israel y Corea del Norte. En total, se estima que el arsenal nuclear mundial es de unas 13.000 armas”.

Las tensiones entre algunos de estos países (por ejemplo, las tensiones entre India y Pakistán o entre Estados Unidos y Corea del Norte) amenazan con escalar a conflictos nucleares en cualquier momento.

Por otro lado, muchos otros países están preocupados por los peligros de no tener sus propias armas nucleares. ¿Acaso Irán, Corea del Sur, Arabia Saudita, Turquía y otros países considerarán necesario tener su propio arsenal nuclear para protegerse y ser tomados en serio en esta era nuclear?

El caótico abandono estadounidense de Afganistán llevó a muchos aliados a cuestionarse su dependencia de Estados Unidos ¿Es el compromiso americano de compartir su paraguas nuclear tan sólido como parecía ser hace unos años?

A medida que más y más naciones, e incluso grupos terroristas, puedan poner sus manos sobre armamentos nucleares, las amenazas y peligros de una debacle nuclear aumentarán exponencialmente.

“Hoy, la humanidad está a sólo un malentendido, a sólo un error de cálculo para que ocurra una aniquilación nuclear”, dijo el secretario general de las ONU, Antonio Guterres, en una conferencia para la revisión del tratado de No-Proliferación de Armas Nucleares, en agosto del 2022.

El peligro de accidentes nucleares

Además de todos los peligros a causa de las tensiones entre potencias nucleares y de líderes impredecibles, la posibilidad de una guerra nuclear “accidental” parece hacer que una debacle nuclear sea incluso más inevitable.

La revista Financial Times reportó: “La historia de los últimos 77 años (a partir de la bomba de Hiroshima) ha estado plagada de accidentes y falsas alarmas que podrían haber desembocado en un conflicto nuclear con mucha facilidad. Un antiguo secretario de defensa estadounidense, William Perry, afirmó que es mucho más probable que una guerra nuclear sea el resultado de un error que de un ataque deliberado, además ‘durante años hemos centrado nuestra postura y nuestras políticas nucleares en prepararnos para un ataque sorpresa por parte del enemigo, pero esas políticas en realidad aumentan la probabilidad de una guerra nuclear accidental’, escribió este secretario de defensa hace unos años” (“300 misiles nucleares se dirigen hacia ustedes. Debes responder. ¿Ahora qué?”, 19 de enero del 2023).

Por otro lado, el escritor Matt Reynolds dio algunos ejemplos de accidentes nucleares en un reportaje en la revista Wired: “En 1981, el departamento de defensa de los Estados Unidos publicó un informe en el que se contabilizaban 32 accidentes que involucraban armas nucleares. En marzo de 1958, un bombardero B-37 que transportaba un arma nuclear desarmada, accidentalmente arrojó la bomba sobre Carolina del Sur. La bomba explotó en el jardín de una persona, destruyendo la casa y abriendo un cráter de 15 metros de diámetro en el terreno. Afortunadamente, en aquel caso, la bomba no contenía material nuclear, pero cuatro años más tarde dos bombas nucleares mucho más potentes que la detonada sobre Hiroshima, cayó accidentalmente de un bombardero B-52 que sobrevolaba Goldsboro, Carolina del Norte. Una de esas bombas se rompió sin detonar, pero una sección que contenía uranio radioactivo se hundió en las tierras de cultivo y nunca se recuperó. La otra bomba atravesó todos sus mecanismos de armado para detonación, menos uno —una detonación accidental estuvo a un solo paso”.

Amenaza de un Armagedón nuclear

Desde que las primeras bombas nucleares fueron lanzadas sobre Hiroshima y Nagasaki, el uso de armas nucleares se ha considerado impensable, al menos durante la mayor parte del tiempo. La destrucción mutua asegurada ha sido un elemento disuasorio poderoso para cualquier uso de este tipo de armamento, pero con la proliferación de naciones con arsenales nucleares, el creciente riesgo de guerras accidentales y el despliegue de armas tácticas más pequeñas, la guerra nuclear ha vuelto a estar sobre la mesa… y en nuestras pesadillas.

¿Qué dice la Biblia acerca de una guerra nuclear?

Obviamente, los escritores de la Biblia no mencionan las armas nucleares de manera explícita. La ciencia y la terminología de guerra se desarrollaron mucho después de su época. Sin embargo, las profecías bíblicas sobre el fin de los tiempos contienen descripciones que son estremecedoramente similares a lo que esperaríamos que ocurriera como consecuencia de una debacle nuclear.

El profeta Isaías escribió sobre una época en la que “las ciudades estén asoladas y sin morador, y no haya hombre en las casas, y la tierra esté hecha un desierto” (Isaías 6:11), tiempo en el cual sólo una décima parte de la población sobrevivirá (v.13). 

La Biblia también profetiza acerca de muertes aterradoras que sobrevendrán a los pecadores en los últimos tiempos:

  • “Una tercera parte de ti morirá de pestilencia y será consumida de hambre en medio de ti; y una tercera parte caerá a espada alrededor de ti; y una tercera parte esparciré a todos los vientos, y tras ellos desenvainaré espada” (Ezequiel 5:12).
  • “Por estas tres plagas fue muerta la tercera parte de los hombres; por el fuego, el humo y el azufre que salían de su boca” (Apocalipsis 9:18).

Con armas convencionales cada vez más letales y otras armas de destrucción masiva, como las armas químicas y biológicas, semejante número de muertos ni siquiera requiere de armas nucleares. Pero desde luego no las descartarán. La humanidad tiene un largo historial de usar todas las armas que tiene a su disposición.

Los escogidos de Dios —los mismos escogidos que juegan un papel importante para evitar la destrucción total de este mundo (Mateo 24:22)— están aprendiendo ahora mismo el camino de la paz.La amenaza de una guerra nuclear de escala mundial, sin duda juega un papel en la reveladora predicción de Jesús de que la humanidad llegaría a un punto en que estaría al borde de la auto-destrucción (Mateo 24:21-22).

Sin embargo, en la misma profecía, Jesús también dio la buena noticia de que Dios no dejaría que el mundo terminara de esa manera: “Porque habrá entonces gran tribulación, cual no la ha habido desde el principio del mundo hasta ahora, ni la habrá. Y si aquellos días no fuesen acortados, nadie sería salvo; más por causa de los escogidos, aquellos días serán acortados”.

La Nueva Versión Internacional traduce el versículo 22 de una manera incluso más clara: “Si no se acortaran esos días, nadie sobreviviría, pero por causa de los elegidos se acortarán”.

Cómo se puede prevenir un conflicto nuclear

Muchas personas entregadas a preservar la paz mundial, han dedicado incontables horas de trabajo a elaborar tratados para intentar evitar la proliferación de armas nucleares y menguar la amenaza de una guerra nuclear. Sin embargo, la mayoría de estos tratados ya han expirado o han tenido una eficacia bastante limitada.

¿Cuál es entonces la solución?

Albert Einstein, cuyas investigaciones fueron las primeras en revelar la increíble energía que se podía liberar del átomo, dijo: “Definitivamente, no soy de la opinión de que el peligro de guerra pueda eliminarse sin un gobierno mundial. Sin tal medida de fuerza, la carrera armamentista, y en última instancia, una guerra de proporciones mundiales es inevitable”.

“Sabemos que ‘prohibir’ cualquier cosa carece de valor. Sabemos por larga experiencia… que, sin las salvaguardias apropiadas, tales obligaciones, por honestas que sean, no se cumplen en caso de una guerra”.

Einstein también dijo: “A menos que la causa de la paz reúna tras de sí la fuerza y el celo de una religión, difícilmente podrá esperar triunfar”.

Sin embargo, incluso 75 años después, los mejores esfuerzos de la humanidad en cuanto a ciencia, lógica, el derecho, el gobierno y la religión, no han logrado traer la paz.

La Biblia nos dice que pronto vendrá un gobierno mundial que sí traerá la paz definitiva. Pero sólo funcionará porque será impuesto por un líder todopoderoso, sabio y amoroso.

Jesucristo regresará para impedir que nos aniquilemos a nosotros mismos. De hecho, en el libro de Isaías, el profeta lo llama el Príncipe de Paz y dice respecto a Él: “Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite, sobre el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora y para siempre. El celo del Eterno de los ejércitos hará esto” (Isaías 9:7).

Hoy en día nuestro mundo no conoce el camino de la paz (Isaías 59:8), pero cuando Jesús enseñe el camino de la justicia y la paz, vendrán resultados maravillosos: “Y el efecto de la justicia será paz; y la labor de la justicia, reposo y seguridad para siempre” (Isaías 32:17).

Los escogidos de Dios —los mismos escogidos que juegan un papel importante para evitar la destrucción total de este mundo (Mateo 24:22)— están aprendiendo ahora mismo el camino de la paz. Están orando por el regreso de Jesucristo y proclamando las buenas nuevas del gobierno de paz de Dios, que vendrá a establecerse en esta Tierra.

Aprenda más acerca de este futuro gobierno de paz en el artículo "El camino de la paz".

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